Obama quiere cerrar Guantánamo

El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, anunció en conferencia de prensa que presentó un proyecto de ley que enviará al Congreso para continuar con la decisión de cerrar en forma definitiva la prisión de Guantánamo, tantas veces criticada no solo en su gestión en la que logró avances para restablecer las relaciones diplomáticas con Cuba, sino también en gobiernos anteriores.
De esta manera, el mandatario manifestó que se trata de «una estrategia para la seguridad nacional» y que «vamos a seguir transfiriendo detenidos a otros países. Eso potencialmente va a hacer que tengamos menos reos». De todas formas, Obama explicó que la idea de cerrar Guantánamo permitirá la construcción de nuevas cárceles en territorio estadounidense para alojar prisioneros, a la vez que declaró que «podemos encausar a estas personas por terrorismo. Tenemos la capacidad de capturar terroristas, proteger a los ciudadanos y podemos enjuiciarlos y encarcelarlos en nuestros penales de máxima seguridad», en referencia a las 13 cárceles incluidas en el proyecto de ley, como las de Colorado y Carolina del Sur, por ejemplo.
Asimismo, el Presidente expresó que «vamos a celebrar la revisión periódica de los detenidos que sigan ahí integrado por todos los sectores del gobierno. Algunos de estos detenidos pueden ser trasladados a otros países» y otros «se encuentran en proceso de revisión».
Recordemos que en el año 2009 Obama ordenó el cierre de la prisión, que fue rechazada por el Congreso, en la que por ese entonces tenía 242 reclusos. Actualmente la cárcel de Guantánamo aloja a 91 personas.
Al respecto, el senador opositor republicano de Arkansas, Tom Cotton, respondió sin medias tintas: «En lo que a mí respecta, hasta el último de los prisioneros puede pudrirse en el infierno, pero si no lo hacen pueden pudrirse en la bahía de Guantánamo».
Finalmente, en vista que la iniciativa tiene las mismas posibilidades de concretarse o ser rechazada, los próximos candidatos presidenciales ya mostraron posturas al respecto. En caso de ganar Donald Trump, Ted Cruz o Marco Rubio probablemente se mantenga en funcionamiento, en cambio Hillary Clinton o Bernie Sanders reflejaron indicios de continuar el proyecto de Obama y dar por finalizada una historia que tiene larga data y muchas acusaciones de tortura, entre otros delitos, de organismos de derechos humanos en todo el mundo.