4 años de aires pampeanos

Los PampasCinco jóvenes con grandes virtudes musicales están celebrando su primer disco, “Coplita de Amor”, y su 4° año a puro folklore tradicional. Ellos son Los Pampas. Los hermanos Guillermo Barnech (primera voz y bombo legüero) y Gabriel Barnech (segunda voz y primera guitarra), junto con Nahuel González (voz y guitarra), Matías Demianiuk (acordeón) y el hijo del llanero Víctor “Chacho” Torres -que siguió los pasos de su padre-, Víctor Darío Torres (voz, guitarra y charango), hacen vibrar los escenarios argentinos con el rasgar de las cuerdas y el resoplar de la verdulera, y dejan al público de pie con ganas de gastar la suela.
“Yo soy de Flores, Capital Federal, y todos somos de acá y Gran Buenos Aires. Gaby y Guille son de acá pero tuvieron su infancia en Hurlingham, Matías es de La Matanza y Nahuel de Ramos Mejía”, cuenta Víctor Torres.
Y entonces, ¿por qué se llaman Los Pampas?
Porque la idea, en su momento, era representar que éramos de acá, y no queda muy feliz decir Los Porteños (risas).
Y no te darían crédito de folklorista…
Sí, claro. Y bueno, como el lugar donde vivimos o donde estamos reunidos pertenece a la llanura pampeana, entonces dijimos, “bueno, Los Pampas suenan folklórico” y es la representación que tiene que ver del lugar de donde nosotros provenimos.
Un poco de historia
Torres es un muchacho con grandes metas en la vida, y se compromete consigo mismo a cumplirlas a diario. Así fue como logró llevar a cabo esta agrupación desde el 2009.
Los Pampas“Todos veníamos de experiencias diferentes. Yo ya tenía el grupo formado anteriormente, pero era algo hecho con mis amigos del barrio. Y por mi viejo, que es fundador e integrante del grupo “Los Llaneros” (Víctor “Chacho” Torres), que ya está retirado ahora, siempre mamé y amé el folklore. Tiene que ver más con mi profesión de profe de música, armador de peñas, tocar, laburar en eventos… (antes laburábamos más en eventos privados). Y ahí surgió. Cuando mis compañeros de toda la vida no pudieron seguir porque se fueron casando, tuvieron hijos, y otras historias, yo seguí en el camino un poco más profesionalmente”, cuenta el cantante. Y sigue con su narración: “Con el primero que me contacté fue con Guille que acercó también a Gaby, porque ellos ya venían tocando juntos. Y después se sumaron Nahuel que venía con Matías, también de otra formación. Y yo quedé en medio de cuatro personas que por diferentes lados ya se conocían (risas). Ahí ya nos empezamos a armar, y más o menos les transmití cómo yo sentía el folklore, la armonía de voces. Habíamos planteado con Guillermo en la primera reunión que tuvimos, que íbamos a tratar de hacer folklore tradicional y volver a nuestras raíces, y dejar de lado un poco los instrumentos más modernos. Tratar de retomar la senda que veíamos que se estaba perdiendo un poquito. No porque no nos guste una cosa o la otra, sino porque en ese momento lo sentimos así y como que queríamos recuperar ese espacio”, expresó Víctor.
Además, el escuchar folklore con los instrumentos autóctonos es completamente diferente que con los instrumentos modernos. Sentís el folklore de otra manera, sentís a la Argentina a través de la música.
381086_10150539055489057_1379107170_nTotalmente. Nos ha pasado que toda esta gente que nos viene siguiendo, que nos viene bancando en todos lados, justamente está a pleno con esa postura y nos dicen que si bien tenemos un sonido muy tradicional en lo instrumental, ya por una cuestión generacional tenemos otro estudio vocal, tenemos otro tipo de impostación que difiere un poco del sonido tradicional de las voces folklóricas. Pero sí mantenemos la esencia de lo que son los arreglos, la instrumentación y toda esa amalgama es lo que da como resultado que hoy la gente se cope tanto. Y por esa razón, decidimos salir un poco del evento privado y avanzar un poco más a la peña, a lo popular, a viajar un poco. La gente nos transmite ese fervor de estar sintiendo la música con instrumentos autóctonos, y el no gritar, y que se escuche y se pueda disfrutar de otra manera. Te pongo un ejemplo: me contaba una persona que nos vino a ver y que a mí también me pasó cuando fui a ver recitales con baterías e instrumentos de gran tamaño, que cuando están en festivales quedan buenísimos, pero en peñas o lugares reducidos hace que todo el volumen suba y que todo sea medio aturdidor. Así que tenemos a los fundamentalistas del bombo legüero (risas), y eso es lo que nos está ayudando a seguir creciendo de esta manera.
Es que ustedes están empezando a tomar al público que dejan de lado los otros grupos folklóricos.
Sí, más que nada porque nosotros no nos embarcamos en tratar de seguir un modelo. Lo que está sucediendo, hoy por hoy, es que los nuevos músicos que vamos saliendo siempre tendemos a imitar algo. Incluso a nosotros nos pasa. Vas a un lado, entregás tu disco y estás estigmatizado, te miran como diciendo: “ah, otros Nocheros más” (risas), y entonces cuando por ahí nos escuchan, no sé si está bueno o no pero por lo menos te dicen que “es algo distinto, bien que tuvieron otra actitud y no buscaron parecerse a nadie”, eso es lo que por lo menos nos vienen recalcando en todos lados.
Además de haber inaugurado Los Pampas, Víctor tuvo un hermoso objetivo que cumplió, sigue vigente y también está cumpliendo sus primeros 4 años
1979 - El folklore hecho amistad con... Los Llaneros FA los 23 años yo ya estaba recibido de Licenciado en Ciencias Políticas y había estudiado en la escuela de música. Siempre la música me hizo más feliz, pero me gusta mucho leer la historia argentina y mundial, la economía política, lo disfruto mucho. Cuando terminé de estudiar, mi primer trabajo oficial fue de sesionista en estudios de grabaciones y empecé a dar una que otra clase. Aunque por mi padre, empecé a laburar con él como sonidista, plomo, afinar la guitarra, todo. Pero digamos que me nació ir a buscar el folklore y comencé a viajar. Hice el norte, el sur, Cuyo, de mochilero con mis amigos, y en todos lados guitarreando en los fogones hasta altas horas de la noche. Todo eso fue generando un público que quería aprender conmigo. Me empezaron a pedir el teléfono y un día tuve en mi casa 40 alumnos de guitarra y de canto. Ahí me decidí. Me plantee que, o me voy y me alquilo un departamento y enseño solo, o puedo hacer esto un poco más integrado y darle la posibilidad a un montón de gente que disfruta del arte tanto como yo. En mi caso con la música, pero hay gente que lo disfruta con la danza, con diferentes expresiones artísticas y que por ahí no tienen ni el espacio ni el lugar para hacerlo. Y así que bueno, me la jugué y abrí el Centro Cultural Eluney, que queda en Boyacá 927 esquina Neuquén, en Flores. A una cuadra de Boyacá y Gaona, donde está el Café La Humedad.
Mi hermana, que estuvo viviendo unos años en San Luis, empezó a trabajar conmigo. Ella es maestra, así que da el apoyo escolar para los chicos. Y ahí también estoy haciendo algo que le doy mucha importancia, que con internet un poco se está perdiendo eso, que es la lectura, así que abrimos una biblioteca popular en este centro para que la gente pueda acercarse a leer y estudiar de manera completamente gratuita. Y en esa amalgama de actividades culturales también están Los Pampas, porque ahí es donde nosotros ensayamos. Previo a las funciones nos internamos ahí horas y horas, dos o tres veces por semana, y es el lugar donde comenzamos en esas peñitas que armamos y empezamos a mostrarnos: primero con un par de temas, después con un par mas de músicos amigos y más tarde nos largamos a tocar solos. Es un lugar donde logramos ensamblar todo y, en mi caso particular, pude amalgamar dos carreras dado que el año pasado en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales me recibí de Magister.
Fue un año de muchos cambios. Fue todo como un gran desafío, que tomo como un año de inflexión… el Centro Cultural, Los Pampas. Me empecé a tomar las cosas un poco más profesional. Ya venía haciendo trabajos profesionales pero desde ese momento fue de tiempo completo. Al otro año me casé y pude comprar mi departamento.
Respecto a sus conciertos, el viernes 12 de julio tocaron en Liberarte a sala llena y con un público alentador
Los PampasLa verdad que era un recital que veníamos esperando mucho, la primera vez en la calle Corrientes y no esperábamos semejante repercusión. Estamos más que agradecidos por la gente. Como siempre decimos, siempre uno arranca tocando para la familia y amigos y, gracias a Dios, con todos los shows que venimos haciendo en este último tiempo, y más que nada después de la salida del disco, eso se fue extendiendo. Ya vienen a vernos una cantidad de gente que supera lo que son nuestros familiares y amigos. Una cantidad muy grande de gente que permitió llenar el teatro de esa manera y que, faltando una semana para el recital, ya estaban casi todas las entradas agotadas.
Hasta hubo gente de pie y todo…
Sí, fue emocionante. Y ya que estamos, esto se lo debemos a nuestra jefa de prensa, Belén Cordero, que se preocupó mucho por nosotros. Laburamos mucho el tema de la prensa, yo por mi lado, y Belu por el suyo. Y cuando se trabaja en coordinación, junto a la productora del espectáculo, Laura Lotito, entre las tres partes trabajamos muy bien y salió 10 puntos. La verdad que fue algo increíble.
La actualidad
Este fin de semana, con frío incluído, no se quedaron en Capital. El jueves se fueron a La Plata, el viernes estuvieron en Rosario y tocaron en la pulpería La Yapa con sus amigos Marcelo (de la pulpería) y Rodrigo (del Hostel A&B que los hospeda). “Son nuestros auspiciantes”, dice Víctor. “Siempre que vamos para aquellos lares nos hospeda, y el amigo Rodrigo es un hermano”.
Los Pampas
Y el sábado estuvieron en la peña El Nuevo Ombú en San Nicolás. “Una gente divina que nos contactó por Facebook, nos contó cómo eran las condiciones para ir allá”, cuenta el vocalista. “Nos encantó, la verdad que han metido una difusión espectacular. Esperemos que salga tan bien como salió la del viernes”.
Por otro lado, están promocionando su primer disco “Coplita de Amor” de la discográfica Utopía, con hermosos temas bien interpretados como “Los sesenta granaderos” (de Hilario Cuadros) o “Mi luna cautiva” (del Chango Rodriguez), y con temas propios compuestos por Torres y Gabriel Barnech: “Volver al pago” y “Vieja estancia”, respectivamente.
Estos cinco muchachos están celebrando cuatro años de éxitos, su primer disco y comparten su alegría con todo el país. La fecha de cumpleaños de Los Pampas es el 24 de agosto y lo festejan en la peña Jina Wasi (Avenida Scalabrini Ortíz 1653, en Buenos Aires). Y Torres hace su invitación: “es la fecha de nuestro primer recital, que dimos para nuestros amigos en el Centro Cultural Eluney, traeremos músicos invitados y esperemos que sea nuevamente una fiesta donde todos podamos celebrar”.
Fotos: www.facebook.com/pages/Los-Pampas