Boleto gratuito para estudiantes bonaerenses

Finalmente, y tras una lucha que tuvo su punto más conflictivo en La Noche de los Lápices en septiembre de 1976, la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires aprobó el proyecto por el cual el boleto educativo estudiantil será gratuito para todos los niveles. Esta iniciativa «beneficiará a unos 6 millones de bonaerenses», según expresó Darío Estévez, presidente de la Federación Universitaria de La Plata (FULP).
Este subsidio «constituye un paso fundamental en la pelea por la democratización social del sistema educativo», expresó el dirigente al referirse a la nueva ley, que estiman rondará los 200 millones de pesos anuales, será para quienes asistan a establecimientos públicos y de gestión privada con aportes provenientes del Estado. Además, el boleto podrá utilizarse en transportes fluviales, ferroviarios y de colectivos urbanos (en todas sus categorías) y se establece que tendrán vigencia durante los días hábiles del ciclo lectivo escolar y para todas las actividades educativas. Vale aclarar que el transporte de larga distancia se contempla solo para estudiantes universitarios con un tope de 4 viajes ida y vuelta por año lectivo.
Asimismo, a priori el límite de viajes autorizados por usuario será de 50 traslados mensuales para el alumnado que se encuentra en primaria y secundaria, mientras que se reduce a 45 para todos aquellos estudiantes que se forman en los niveles terciarios y universitarios. También se incluyen a los residentes o practicantes y los alumnos que por diversos motivos tengan que realizar su actividad curricular en otro lugar que no sea el establecimiento educativo.
Sobre este logro que lleva casi 4 décadas de lucha, el vicepresidente del Área Institucional de la Universidad de La Plata, Fernando Tauber, dijo que permitirá «saldar, al menos en parte, una antigua deuda con aquellos jóvenes estudiantes de los 70′ que reclamaban ese derecho. Desde lo simbólico, representa una reivindicación histórica, un acto de justicia para aquellos chicos que un 16 de septiembre de 1976, dejaron su vida y sus sueños en la trágica Noche de los Lápices».
De todas formas, Estévez manifestó que «hay que seguir peleando, en las calles y en unidad como lo venimos haciendo, para que este derecho sea extensible también a los trabajadores de la educación».