Cooperación a la boliviana

Los presidentes de Bolivia y Argentina, Evo Morales y Mauricio Macri, reafirmaron su voluntad e intención de fortalecer la integración bilateral en materia energética y de salud a la vez que impulsar el comercio a través de la hidrovía Paraguay-Paraná.

El mandatario boliviano realizó su primera visita a Argentina desde la asunción de Macri y recorrió la base aérea de El Palomar, donde evaluó el avión Pampa III de fabricación nacional, que su país podría comprar para equipar a su Fuerza Aérea dentro de un acuerdo de provisión de gas vigente hasta 2026.

Otras cuestiones analizadas de la agenda bilateral fueron la necesidad de contar con herramientas financieras para el comercio y las inversiones, y se instruirá a los respectivos bancos estatales a promover acuerdos en esa materia. En el sector energético enfatizaron la importancia de iniciativas para que la empresa estatal boliviana de petróleo invierta en Argentina y participe del abastecimiento a futuras plantas para exportar gas natural licuado (GNL) desde territorio argentino tanto como de la futura provisión de petróleo y/o combustibles terminados de Argentina a Bolivia y la cooperación para fabricar biocombustibles.

«Combatir amenazas comunes»

Ambos presidentes expresaron su «firme compromiso» de seguir trabajando juntos para «combatir amenazas comunes como narcotráfico, contrabando y tráfico de personas».

En una conferencia de prensa, Macri precisó: «Estuvimos hablando del contrato de gas y del avión Pampa con el que esperamos equipar a la Fuerza Aérea de su país. Seguiremos tratando otros temas que son de interés de ambos países: de nuestro futuro, no solo de la energía, sino del intercambio comercial; equipamiento hospitalario; la Hidrovía Paraguay-Paraná; y el intercambio cultural, que son importantes para nuestras comunidades».

Además, Mauricio Macri elogió a la comunidad boliviana residente en Argentina, a la que calificó de «trabajadora y emprendedora, respetuosa en la convivencia, que siempre nos ha dado una enorme alegría en este esfuerzo compartido de construir una mejor realidad para todos» y remarcó que «esta visita, querido Presidente, la tomamos en el marco de la profunda e histórica amistad que existe entre nuestros países».

Evo Morales, en tanto, señaló que Bolivia comenzó a «adquirir tecnología argentina» y destacó los avances en acuerdos energéticos y se mostró complacido por los progresos hechos en el sector de biocombustibles. Respecto a los acuerdos sobre gas y electricidad, indicó que «las negociaciones van avanzando muy bien».

En relación a la recorrida por la base de El Palomar y el análisis del Pampa, adelantó que enviará un equipo técnico y pilotos para empezar a negociar su adquisición para las Fuerzas Armadas de Bolivia.

«Tenemos la obligación de buscar la transferencia de tecnología como hermanos latinoamericanos», manifestó, y señaló que por lo general en la región cuando quieren adquirir tecnología «viene de Europa, de Asia, de Norteamérica» y sostuvo que entre países hermanos y vecinos existe «la obligación de compartir nuestra tecnología».

Por otra parte, Morales informó que se convino «construir tres hospitales con tecnología argentina» en su país y que se trabajará en «la cooperación científica para fortalecer el desarrollo del biocombustible», un área en la que mencionó que «Argentina tiene mucho avance».

Asimismo, Morales remarcó que la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) ya se encuentra autorizada para operar en el sistema eléctrico argentino y anunció que, una vez finalizado el tendido eléctrico hasta ese país (entre Tartagal y Yacuiba), comenzará a prestar ese servicio. «Al concluir el tendido vamos a empezar a compartir lo poco que tenemos en el tema energético», señaló el presidente boliviano. Morales también manifestó que se acordó que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) tenga «la posibilidad de comercializar directamente gas natural a Argentina» y que «participará en las inversiones» para la instalación de plantas de Gas Natural Licuado (GNL).

Finalmente, Morales indicó que se resolvió entre los presidentes «reubicar la zona franca otorgada a Bolivia en Rosario para darle mayor funcionalidad y fortalecer el comercio boliviano» e integrar de forma plena al país vecino al sistema logístico, portuario y productivo de esa vía navegable.