Discusiones subterráneas

A fines de este año la concesión de la empresa Metrovías para manejar el subte de Buenos Aires llega a su fin. Por lo tanto, en la Legislatura Porteña comenzó el debate sobre cómo continuará el servicio. Los 6 proyectos presentados por la oposición promovían en distinto grado y alcances la reestatización del servicio. Por el contrario, el del Ejecutivo planteaba un llamado a licitación pública nacional e internacional para la concesión de la operación y el mantenimiento del servicio de las cinco líneas de subte y el premetro, por un período de 12 años con la opción de tres más. Metrovías es concesionaria del servicio desde la década de 1990, cuando comenzó a explotar el subte por un convenio firmado con la Nación, y continuó cuando posteriormente el servicio pasó a manos del Gobierno de la Ciudad.
Tras la reunión plenaria de las comisiones de Obras Públicas, Tránsito y Transporte y Presupuesto, se dio dictamen a la propuesta de Horacio Rodríguez Larreta, por lo que se prorrogaría la concesión hasta diciembre de 2018 y se llamaría a una licitación para renovar la concesión por un período de 12 años con opción a tres más.

Licitación nacional e internacional

Maximiliano Ferraro, diputado del bloque oficialista Vamos Juntos y vocal de la Comisión de Tránsito y Transporte, señaló que «la licitación será nacional e internacional, por lo que esperamos que distintas empresas de la Argentina y también del exterior que operan otros metros del mundo puedan ofertar y así mejorar el servicio de subte en la ciudad».
El legislador remarcó que, con la nueva licitación, se buscará modificar el modelo concesionario actual por uno más moderno, ya que con el sistema que rige hasta este momento «el Estado, en vez de recibir el canon por parte de la empresa, se la pasó pagando subsidios. No solo sucedió con Metrovías sino que lo vimos en toda la historia del transporte de nuestro país».
Finalmente, Ferraro precisó que «en este modelo que nosotros estamos proponiendo se establece que el nuevo concesionario va a tener que pagar por coche, por kilómetro recorrido y por pasajero trasladado. Esto garantiza una mejor calidad en el servicio».

Más prestación, más canon

Por su parte, el legislador de Confianza Pública y presidente de la Comisión de Obras y Servicios Públicos, Diego García Vilas señaló: «Me parece importante subrayar que Sbase va a seguir teniendo el control de la empresa que gane la licitación, al igual que todo lo que refiera a la ampliación del sistema ferroviario y los negocios colaterales: la concesionaria solo estará a cargo de la operatividad y el mantenimiento de los trenes. Además, el proyecto contempla que la adjudicataria deberá absorber la planta de trabajadores que prestan servicios en el Subte, con reconocimiento de los mismos derechos laborales que ostentan a la fecha».
Además, el legislador remarcó que «se hace una modificación sustancial con respecto al canon que cobra la prestataria por sus servicios, que deja de ser un valor fijo: el proyecto plantea una retribución por coche/kilómetro recorrido, es decir, que el monto va a variar en relación al servicio de Subte (a mayor servicio y frecuencia, mayor canon). Creo que este punto se va a reflejar en mejores servicios para los usuarios». Por último, García Vilas señaló que se creará «una comisión de seguimiento y control del proceso licitatorio, que va a estar integrada por legisladores porteños».

Los requisitos

Quienes se presenten a la licitación deberán acreditar experiencia específica no menor a 15 años en la operación de subterráneos o metros y deberán haber transportado en los últimos tres años por lo menos 150 millones de pasajeros. Asimismo, quien sea elegido como adjudicatario tendrá que conformar una sociedad anónima cuyo objetivo sea prestar el servicio público de subte y tendrá que «absorber, a su exclusivo cargo y costo, el personal en relación de dependencia que, a la fecha de la toma de posesión del servicio, esté afectado en forma exclusiva al subte, de acuerdo con el listado de dotación aportado por Sbase».
El despacho de mayoría será debatido en la sesión del jueves 2 de noviembre. En este punto hay discrepancias respecto de la cantidad de votos necesarios para aprobar el proyecto. Desde el oficialismo se asegura que son suficientes 31 votos, la mitad más uno de la cámara, desde la oposición sostienen que se requiere una mayoría especial de 40. Los argumentos son: en el primer caso que se trata de la concesión de un servicio público, mientras que en el segundo se considera que lo que se debate es la concesión de un dominio público.
Otro detalle a tener en cuenta es que si prevalece la postura opositora será necesaria seguir el proceso de doble lectura, es decir, una primera aprobación seguida de una audiencia pública para que opinen los vecinos y, luego, una segunda y definitiva sanción.
Desde los bloques opositores se reclamó la estatización del servicio de subtes y premetro. Al respecto, el diputado Javier Andrade (Frente para la Victoria) recordó que «Mauricio Macri cuando fue jefe de gobierno había prometido que haría 10 kilómetros de subte por año. Sin embargo, actualmente el promedio es de un kilómetro por año», y mencionó que «las diferencias entre el Norte y el Sur también se ven en el subte», ya que «mientras las redes del Norte tienen aire acondicionado y mejores vagones, las del Sur son de las peores, con vagones muy viejos y sin aire».