Docentes sin paritarias

Como en cada comienzo de año, los trabajadores registrados deben, representados por sus gremios, negociar las paritarias salariales que incluyen los incrementos de sueldos y diferentes aspectos de la relación laboral.
Una de las negociaciones principales, y más problemáticas, es la de los docentes. Y los sindicalistas ya están en pie de guerra ante lo que consideran una «decisión unilateral y arbitraria del Gobierno Nacional» de modificar por decreto la Ley de Financiamiento Educativo.

Cambio de proporción

El presidente Mauricio Macri, entre otros puntos, cambió la conformación de la mesa docente para negociar las paritarias. Actualmente la representación es proporcional y, de esta manera, la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) tiene cinco lugares y los otros cuatro gremios con representación nacional (UDA, Sadop, CEA y AMET), uno cada uno. Con el cambio, que modifica el decreto rubricado por Néstor Kirchner en 2007, que reglamentó la mencionada ley (N° 26.075), cada gremio tendrá un solo representante.
Esta representación de los trabajadores docentes del sector público de gestión estatal, de las provincias y de la Ciudad de Buenos Aires «será ejercida por un miembro de cada asociación sindical de primer, segundo y tercer grado con personería gremial y ámbito geográfico de actuación en materia docente en todo el territorio nacional», menciona el texto.
Otro aspecto es la temática que incluye la negociación entre gremios y gobierno. Hasta hoy se debían discutir diversos aspectos de la labor educativa, entre ellos «retribución mínima de los trabajadores docentes». Ahora, ese ítem se elimina y se determina que en la mesa de discusión se hablará de cuestiones como «condiciones de ingreso a la carrera docente», «régimen de vacantes», «jornadas de trabajo», «derechos sociales y previsionales», entre otros puntos. No es un factor menor el hecho de disminuir los representantes de CTERA, ya que abarcan a más del 70% de los maestros de todo el país y tiene una capacidad de presión decisiva para que las medidas de fuerza sean exitosas o no.

Cambia el salario docente

Con relación al salario mínimo docente, el decreto 52/2018 dispone que el monto «no podrá ser inferior al 20% por encima del salario mínimo vital y móvil vigente». Este es de 9.500 pesos, por lo que el salario mínimo docente sería de 11.400 pesos. «El piso lo que busca es terminar con las desigualdades en las provincias, pero ya no se discutirán salarios a nivel nacional. Si se mueve el salario mínimo a mitad de año, también se correrá el piso docente», se argumentó desde el Gobierno.
Como justificativo para el decreto se señaló la necesidad de actualizar el «ámbito de discusión del convenio marco, garantizando la equidad en la representación de todas las voces con el fin de mejorar las condiciones generales de los docentes del Sistema Educativo Nacional, adecuando la normativa vigente y estableciendo nuevos criterios de relación».
«Para alcanzar los consensos básicos que permitan sostener una política de Estado en materia educativa, resulta necesario garantizar la plena participación y la pluralidad de opiniones de las entidades gremiales docentes», se añade en el decreto.

Respuesta docente

Desde CTERA, el gremio más afectado, se repudió «la decisión unilateral y arbitraria del Gobierno Nacional que modifica las condiciones de la Paritaria Nacional Docente, que habían sido refrendadas por la Ley 26.075 de Financiamiento Educativo y por el Decreto 457 del año 2007».
Por medio de un comunicado, el gremio sostuvo que «el Gobierno avanza con el desmantelamiento de la instancia de negociaciones colectivas a nivel nacional, modificando de manera unilateral los acuerdos que habían establecido los sindicatos docentes con representatividad reconocida como Ctera, Sadop, CEA, AMET y UDA». Al respecto de la cuestión salarial, los gremialistas señalaron que «se pretende limitar las discusiones salariales a cada jurisdicción, sin tener la posibilidad de que se discuta a nivel nacional el piso mínimo ni las condiciones generales para un proceso de recomposición salarial del sector».
De esta manera, la titular de CTERA, Sonia Alesso, y el secretario general de la Internacional de la Educación en América Latina (IEAL), Hugo Yasky, denunciarán ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Internacional de la Educación «este nuevo ataque del Gobierno a los derechos de los trabajadores y trabajadoras de la educación».
Además, en declaraciones radiales, Alesso aseguró que el decreto «es la violación de nuestro convenio colectivo de trabajo. No saben cómo explicar este mamarracho jurídico», a la vez que manifestó que «los países serios tienen paritarias y respetan los convenios colectivos» y remarcó que «no van a conseguir que CTERA abandone la lucha. Nosotros tenemos una historia peleando, hemos llevado adelante luchas ejemplares».