La cultura no se clausura… y es ley

En una sesión extraordinaria en la Legislatura Porteña, este jueves se sancionó la Ley de Centros Culturales de manera unánime entre todos los legisladores.
Este proyecto, que obtuvo 56 votos a favor, establece normas regulatorias al funcionamiento de los centros culturales de la Ciudad de Buenos Aires, que podrán ser implementadas paulatinamente, ya que reconoce la preexistencia de los mismos, punto cuestionado por el PRO junto a la diferenciación entre establecimientos comerciales y no comerciales. Además, la nueva ley incluye un rango de impuestos con diversos beneficios, señala actividades permitidas e introduce en el Código de Habilitación y realiza modificaciones en el Régimen de Planeamiento Urbano a los centros culturales.
Al respecto de la iniciativa, Gabriela Alegre (presidente del bloque kirchnerista) expresó que «esta ley es un símbolo de lo que podemos llegar a hacer cuando nos escuchamos para llegar a un consenso». Vale recordar que el proyecto fue llevado adelante por su partido en conjunto con agrupaciones de artistas y centros culturales de la ciudad.
Otro que celebró la sanción fue Pablo Ferreyra (Seamos Libres), quien manifestó que se va a otorgar legalidad y legitimidad «a los centros culturales que tanto aportan a la identidad». También se sumó al logro Claudio Coreman, perteneciente a uno de los espacios que diseñaron el proyecto: «Esto es un gesto del sector político que hizo acuse de recibo de nuestras manifestaciones, que exigíamos salir de la clandestinidad para darle un lugar a la cultura independiente».
«Esto es un paso muy importante porque viene a cubrir un vacío legal y crea un marco normativo que garantiza la estabilidad de los centros», resumió Edgardo Form (Nuevo Encuentro).