Manipulación genética: ¿controlada?

Los recientes ensayos sobre la modificación genética de embriones humanos llevados a cabo por un grupo de científicos chinos, provocan una controversia multifactorial. Si bien la iniciativa tuvo como objetivo modificar los genes responsables de una enfermedad hematológica hereditaria, los resultados obtenidos no satisfacen las expectativas de gran parte de la comunidad científica.
Entretanto, y desde el punto de vista ético, genera discusiones de orden filosófico y hasta teológico donde se dirime acerca de la profunda transformación de los valores morales posmodernos en términos de nuevas formas de concepción y alteridad humana.
Así, la bioética señala un giro copernicano en términos de manipulación genética pero advierte sobre las múltiples consecuencias impredecibles e indeseadas que tales procesos de investigación pueden provocar.
Desde una concepción estrictamente científica, el control de las situaciones experimentales ensayadas evidenció que la seguridad de estas investigaciones es vulnerable. Ello se manifestó en la cantidad de mutaciones que surgieron adicionalmente a las previstas por el protocolo del equipo del genetista Jujnjiu Huang. Esta imprevisibilidad se debe justamente al estado embrionario de este tipo de ensayos que pretenden modificar embriones humanos.
En conclusión, la modificación genética impulsa un debate sobre el futuro inmediato del devenir histórico y sobre la posibilidad de alterar a la humanidad. Todo ello debe tenerse en cuenta considerando el ritmo acelerado del avance del conocimiento científico, su aplicación tecnológica y el impacto social derivado.
Artículo elaborado especialmente para puntocero por Karina Vázquez.