Nuevas horas en Sudamérica

Que son tiempos de cambio en la política sudamericana no es nuevo, pero los cambios han llegado hasta los relojes. Y eso sí es novedoso.
En Bolivia, la fachada del edificio donde funciona la Asamblea Plurinacional, en La Paz, el reloj marca horas distintas. O para ser más exacto, en un sentido inverso. Desde ahora tiene las agujas girando hacia la izquierda, en sentido anti horario “normal” y los números están en el sentido contrario al habitual. Se lo ha denominado Reloj del Sur y también se le cambió la numeración, que era romana, al decimal. El mecanismo fue puesto en funcionamiento el 21 de junio, día del año nuevo andino amazónico.
En palabras del titular de la Cámara de Diputados boliviana, Marcelo Elío, esto se ha hecho para representar «la identidad de los pueblos del sur». Al respecto, señaló que «en el sur nacen las ideologías que pretenden cambiar el mundo de injusticias del norte» y añadió que el reloj «marca exactamente la hora, pero hay que cambiar los esquemas mentales para reacostumbrarse a pensar desde el sur y no de la manera convencional, impuesta desde el norte. Sabemos que van a haber críticas y mucha resistencia, pero todo cambio es así, el desafío es construir un nuevo mundo y retomar el nuevo camino”, afirmó el funcionario.
Por su parte, el canciller boliviano David Choquehuanca, de la etnia aymará, sostuvo que el cambio de reloj se debe a que «estamos en el sur y estamos en tiempos de recuperar nuestra identidad. En el norte, el 21 de diciembre se celebra el solsticio de invierno; nosotros celebramos aquí el solsticio de verano. Cuando ellos celebran el solsticio de invierno, nosotros celebramos el solsticio de verano. Nosotros estamos en el sur y como estamos en tiempos de recuperar nuestra identidad, el Gobierno boliviano está recuperando nuestro sarawi (camino)”, afirmó.
Choquehuanca reiteró que esa lógica se basa en que el planeta se divide en dos hemisferios. “Ya antes había este tipo de relojes. Yo tengo un reloj que me compré en Londres que gira hacia la izquierda; y en esa tienda (donde lo compré) dice ‘para los del sur’ (…). Tenemos que romper esos formatos que nos han traído. Tenemos que ser capaces de valorar lo nuestro”, sostuvo el canciller.
Quejas municipales
Sin embargo, pese a ser una iniciativa del gobierno nacional, ha habido cuestionamientos a la medida. Estos surgieron desde la Municipalidad de La Paz. La directora de Patrimonio de ese municipio, Ximena Pacheco, indicó que la modificación del reloj quebranta la Ley 3.087 del 23 de junio de 2005 que establece la protección y conservación de este edificio declarado monumento nacional. Según la funcionaria, el patrimonio arquitectónico de la Asamblea es de categoría «A», es decir, que cualquier obra en el edificio de la Asamblea debe estar orientada a mantener, asegurar, recuperar y revelar la capacidad testimonial, estética e histórica de la edificación.
«Cualquier intervención de sus componentes debe ser efectuada en correspondencia a la totalidad de la obra, historicidad y distintas etapas histórico-constructivas con valor testimonial intrínseco. Ningún elemento puede ser modificado o sustituido de forma independiente o respondiendo a criterios coyunturales», precisó Pacheco.
El edificio de la Asamblea fue declarado patrimonio histórico cultural de la ciudad de La Paz por la Ordenanza Municipal 076/99 HAM – HCM 074/99. Actualmente está en vigor la Ordenanza Municipal 150/2009, que establece sanciones en caso de que le produzcan daños al patrimonio histórico.
El debate seguirá, seguramente, sobre si este cambio puede tener un efecto más duradero y efectivo que el visual y sobre si podrá hacerse una revolución desde el sur en el sistema económico y político mundial tal como sostiene el gobierno boliviano que está haciendo con este proyecto político.