Por decisión mayoritaria del Consejo General de Educación, en la provincia de Buenos Aires se podrá volver a utilizar las notas menores a 4 e insuficiente para calificar a los alumnos de escuelas primarias que no alcancen los logros mínimos. La eliminación de estas notas se había adoptado en septiembre de 2014. En su momento se sostuvo que este cambio se realizaba para «no estigmatizar» a los estudiantes con las notas más bajas como 1, 2 y 3. De esta manera, ahora se podrá calificar con esos números a los alumnos desde 4° a 6° grado, mientras que para los chicos de 1° a 3° a nivel conceptual la escala irá de «insuficiente» a «sobresaliente», pasando por «regular, bueno y muy bueno».
Tras el anuncio de esta medida algunos docentes se manifestaron en contra de la misma. Al respecto, Néstor Carasa, consejero general de Educación de SUTEBA, consideró que «es un cambio sin consulta y sin diálogo, donde no se abrió la participación de todos los actores que son los docentes, alumnos y su familia para implementarlo». «Hablamos de niños de 9,10 u 11 años, que no se merecen tener un 1, 2 o 3 en el boletín», declaró Carasa y precisó que «una escala numérica no refleja en términos el aprendizaje. Para un niño de 9 o 10 años un aplazo no es un estímulo».
El sindicalista expresó que «lo fundamental cuando un niño no aprende no es la calificación que le voy a poner sino qué voy hacer para que el niño aprenda. Hay chicos que necesitan más apoyo para el aprendizaje, la escuela tiene que velar para que ese apoyo exista en la escuela».
Por su parte, Sergio Siciliano, subsecretario de Educación bonaerense, manifestó que «el sistema de calificaciones debía ser modificado. No pasa por aplazar a un chico, el docente no evalúa con la idea de aplazar o no aplazar. Tiene que ver con la concepción de informar a la familia del proceso de educación de los chicos», señaló.
Finalmente, Siciliano afirmó que «es una decisión tomada, nos queda trabajar con las escuelas para llevar adelante este cambio en el próximo cierre de trimestre, es una forma de mejorar para saber en qué situación estamos y cómo mejorar».
El ministro de Educación bonaerense, Alejandro Finocchiaro, dijo que «hay que terminar con la pedagogía de la compasión». Además, sostuvo que «estigmatizar es hablar peyorativamente de una cualidad subjetiva que hace a la esencia de la persona -su color de piel, su nacionalidad, sus creencias religiosas, políticas-, pero hablar de una nota que, eventualmente, esforzándote podes mejorar y cambiarla, no estigmatiza».
Al hablar de la necesidad de esta modificación dijo que se debe a la necesidad de volver a «nivelar para arriba, no para abajo, si no estafamos a los chicos. Los chicos pasan y pasan, terminan quinto año, van a conseguir trabajo y no los toman; van a la universidad y ni pasan los exámenes».
El diputado bonaerense Mario Giacobbe respaldó la iniciativa oficial de retornar a ese sistema de evaluación que, tras la reforma implementada hace un año y medio, tiene al 4, 5 y 6 como notas más bajas. Más aún, en 2014 el legislador del bloque Justicialismo Bonaerense, presentó un proyecto de ley para «dejar sin efecto la resolución 1057/14» del gobierno de Daniel Scioli que anuló los aplazos. Así, la circular para que empiece a regir este cambio sería enviada esta semana a las escuelas antes del cierre de los boletines.
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