Running, cuidados necesarios y víctimas en competencias

Día a día cada vez más personas se vuelcan al running y, mes a mes, esta disciplina del deporte tiene más aficionados.
En la actualidad mucha gente encuentra una gran cantidad de beneficios y motivos por los cuales sale a correr. Podemos hablar de sociales, ya que uno arranca corriendo solo y a medida que uno se encuentra en un buen nivel físico, de entrenamiento y aeróbico, su nivel de satisfacción es mayor y se anima a correr competencias en carreras de calle, conoce otras personas y llega a entablar vínculos, compartir entrenamientos y carreras. Otro beneficio es el que tiene que ver con la salud, siempre que los entrenamientos y crecimiento sea progresivo y prudencial, siempre escuchando al cuerpo y saber hasta dónde llegar. Muchas personas que realizan esta actividad encuentran en el salir a correr bajar las tensiones y preocupaciones laborales, desenchufarse de los problemas que uno tiene a diario, relajarse, despejarse, poder utilizar el tiempo de uno para pensar y muchos etcéteras más.
A medida que uno se va planteando objetivos más complicados, logrando un crecimiento en este ambiente, los esfuerzos que uno debe realizar también son mayores, exigiendo el cuerpo. Muchos empiezan corriendo 5 kilómetros y, al ver los buenos resultados obtenidos, se empiezan a plantear correr distancias más largas, bajar los tiempos o hacer carreras de aventura. Para eso es necesario que visitemos a un médico y hagamos un apto físico (generalmente consta de análisis de sangre, orina, electrocardiograma, ergometría, ecodoppler del corazón, espinograma) para quedarse tranquilo que uno está en condiciones de hacer dichos esfuerzos. La visita al médico y los controles deben realizarse cada 6 o 12 meses, aproximadamente.
Como consecuencia del crecimiento del running empiezan a surgir organizaciones que realizan carreras de calle de distintas distancias y modalidades. Junto con los organizadores, los sponsors se hacen cada vez más presentes y acompañan la actividad, haciendo más marketing en carreras donde el número de inscriptos es muy alto, la clase social es media-media alta y la edad ronda entre los 20 y 45 años de edad en ambos sexos.
Muchas organizaciones, debido al boom del running, empiezan a ver en este mercado un negocio muy rentable, en el que en vez de priorizar a los runners se suele priorizar la rentabilidad del negocio. Los servicios que deben brindarle a los corredores muchas veces no son acordes a los costos de inscripción, ya que no suelen ser baratos.
Las marcas que realizan estos eventos en distancias de media maratón o maratón a la hora de la inscripción hacen completar y firmar un formulario a los corredores en el cual dice que ellos están en condiciones de correr esa distancia, que tienen un entrenamiento adecuado para participar, desligándose en el caso que surja algún problema delicado con la salud de los competidores. En el caso de las ultra maratones sí suelen pedir aptos físicos.
Tres actores deben controlar a los runners: uno mismo debe ser consciente del esfuerzo que debe realizar en una carrera y debe hacerse controles periódicos a la hora de competir, los organizadores deberían pedir el apto físico como condición de inscripción asegurándose por un profesional que el runner está en condiciones, priorizando de esta manera el valor humano y no el negocio y si no, en todo caso, debería controlar más estos eventos la Secretaría de deportes.
En los últimos tres meses tres fueron las personas que perdieron sus vidas en media maratón y maratón.
El pasado 29 de junio falleció Ricardo Subiela de 55 años de edad, en la Maratón de la Bandera en la ciudad de Rosario. Ricardo sufrió un infarto al finalizar los 42.195 metros, se lo trasladó de inmediato al hospital Centenario, pero nada pudieron hacer los médicos ya que falleció en la guardia.
El 22 de junio perdió la vida Pablo Esteban Pérez de 39 años. Sufrió un paro cardio respiratorio en el cerro Las Ánimas, cerca del monumento Quijote de la ciudad de Tandil, cuando disputaba los 21 kilómetros de aventura organizados por una firma de indumentaria. El hecho sucedió cuando ya había recorrido 17 de los 21 kilómetros de dicha competencia. Otro caso de muerte súbita en el cual los médicos no pudieron hacer nada.
El 20 de abril tuvimos que lamentar la pérdida de Ezequiel Ponce, de 27 años. El hecho ocurrió tras finalizar los 21.000 metros que disputó en la ciudad de Córdoba y, al ser premiado en la Plaza de la Intendencia una vez finalizada la media maratón, falleció de muerte súbita. No pudieron hacer nada por él los médicos y ambulancias que estaban en el lugar.
Seamos conscientes que a veces todo crecimiento implica un esfuerzo adicional, y ese esfuerzo y entrenamiento debe ser medido y controlado por uno mismo y un profesional.