Salven a la lengua

Boa Sr
Boa Sr

Un idioma muere cuando deja de ser la lengua materna de una persona. Según datos de UNESCO, se estima que existen más de 6.800 idiomas en el mundo, pero solamente el 5% de estos son utilizados por el 95% de la población. Y, además, diversos estudios calculan que por mes desaparecen dos lenguas de la faz de la Tierra. Uno de los casos más emblemáticos es el que sucede en India. Más de 200 idiomas desaparecieron en dicho país en la última mitad de siglo. Esto significa que en 50 años la cantidad de dialectos que se hablan en la actualidad se redujo a 800. Por ejemplo, en el año 2010 el Bo, un dialecto de la tribu andamanés situada en el sur de la India, se declaró extinto al morir su último hablante luego de 65.000 años de existencia de esta comunidad: se trataba de una octogenaria llamada Boa Sr que, dicho sea de paso, fue una sobreviviente del tsunami de 2005. Mucho más cerca en tiempo y espacio, otro de los idiomas en peligro de extinción es el aonikenk, más conocido como tehuelche, en la región patagónica.
BA17-27
Comunidad tehuelche

Entre los principales motivos para que una lengua encuentre su final se halla la dominación de idiomas predominantes (como el inglés, el español, ruso o el chino), la globalización, la falta de impulso y defensa por  parte de los gobiernos de sus lenguas originarias, los desastres naturales que barren con comunidades enteras, la migración y desplazamiento de tribus que pierden sus raíces y deben adaptarse a nuevos entornos, las religiones que prohíben o atacan la diversidad de lenguas y, por supuesto, la educación y la economía que obligan a la adaptación de los seres humanos para integrarse a un sistema perverso que moldean sociedades y naciones enteras sin pedir permiso.
Entre los anuncios más pesimistas sobre el tema, el instituto Worldwatch (organización fundada en 1974 por Lester Brown) sentencia que, para fines de siglo, se perderá entre el 50 y 90% de los dialectos en todo el planeta, mientras que el lingüista Peter Ladefoged lo coloca en alrededor de un 40% para el mismo periodo.
lenguas muertasPero no todo está perdido, porque existen iniciativas que promueven la enseñanza de idiomas que se encontraban extintos o en total desuso tales como el maorí, el galés, el navajo, la incorporación del aha punana leo en escuelas de Hawaii (prohibido por Estados Unidos al incorporar las islas a su Estado), el cornish en Inglaterra (lengua muerta en el año 1777), dialectos mayas en México y el hebreo, que creció en forma considerable durante el siglo pasado hasta convertirse en el idioma oficial de Israel.