Sigue el reclamo por Malvinas

Al cumplirse 183 años de la ocupación británica del archipiélago de Malvinas, el Gobierno Nacional reiteró su reclamo para solucionar de manera pacífica la disputa por la soberanía de las islas. Mediante un comunicado la Cancillería ratificó los derechos soberanos de nuestro país e instó al dialogo para llegar a un acuerdo con el Reino Unido.
«El 3 de enero de 1833, las Islas Malvinas fueron ocupadas por fuerzas británicas que desalojaron a la población y a las autoridades argentinas allí establecidas legítimamente, reemplazándolas por súbditos de la potencia ocupante. La República Argentina protestó inmediatamente ese acto de fuerza ilegítimo que aún se mantiene, sin consentirlo en momento alguno», señala el texto del Palacio San Martín.
La cartera a cargo de Susana Malcorra señaló que «hace décadas que la comunidad internacional destaca a la Cuestión de las Islas Malvinas como una de las formas de colonialismo a la que debe ponerse fin. E insta a Argentina y el Reino Unido a encontrar una solución pacífica y duradera a la disputa de soberanía, a través de las negociaciones bilaterales». Entre los organismos ante los que Argentina reclamó por la solución al conflicto se encuentran la Organización de las Naciones Unidas, las cumbres de Presidentes de los Estados Partes del Mercosur y Estados Asociados, de la Unasur, de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y de la Cumbre Iberoamericana.
Además, el mensaje remarca «el objetivo permanente e irrenunciable de recuperar el ejercicio pleno de la soberanía sobre dichos territorios y espacios marítimos, de conformidad con los principios del derecho internacional y respetando el modo de vida de los habitantes de las Islas Malvinas. Este objetivo es una política de Estado y responde al anhelo de todo el pueblo argentino».
De esta manera, la Cancillería manifestó que «desde el inicio mismo de su existencia como nación independiente, la República Argentina exteriorizó a través de actos de gobierno su voluntad política de ejercer su soberanía efectiva en los territorios australes y espacios marítimos heredados de España».
Al cumplirse un nuevo aniversario de la expulsión de los ocupantes y la ocupación por parte del Reino Unido, la Cancillería exhorta a esa nación a «reanudar las negociaciones con miras a resolver -a la mayor brevedad posible, y de manera justa y definitiva- la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, a través del camino del diálogo, la paz y la diplomacia».

Malvinas, un tema central

A los pocos días de asumir su cargo, la canciller Susana Malcorra expresó en una cena que la disputa por el archipiélago iba a ocupar espacio en su agenda. Al respecto, señaló que «el tema de Malvinas no se esquiva porque es un tema histórico y central. Hay un profundo sentimiento de los argentinos. Nadie esquiva los temas. Es un tema que está allí y tenemos que intentar ver si hay mecanismos para avanzarlo». Igualmente, aclaró que este conflicto «no impide el reconocimiento de que las relaciones entre el Reino Unido y Argentina tienen un montón de otras áreas en las cuales hay que trabajar».

Cameron en una posición dura

Al dar su discurso de fin de año, el premier británico David Cameron dijo que, ante el cambio de gobierno en Argentina, espera una relación «más madura» entre Londres y Buenos Aires, pero remarcó que es «inflexible» la posición del Reino Unido respecto del «derecho a la autodeterminación» de los habitantes del archipiélago. «Tengo la esperanza de que la elección de un nuevo presidente en Argentina nos permita movernos hacia una relación más madura. Está claro que existen muchas áreas en las que la cooperación nos beneficiaría a ambos”, indicó el líder conservador.
A su vez, Cameron manifestó que su gobierno «presionará» para defender la explotación de los yacimientos de hidrocarburos detectados cerca de las costas de las islas atlánticas. Sin embargo, precisó que «he hablado con el presidente Macri y, aunque estoy dispuesto a mejorar las relaciones con Argentina para el beneficio de todos, he sido claro en el hecho de que eso no cambia la posición de mi Gobierno sobre su derecho a la autodeterminación. En eso somos inflexibles».