Siria: vuelve la tensión

Luego de un 2016 teñido por sangre derramada de sirios e iraquíes, todo parecía calma en el inicio de este año. Pero en marzo las cosas parecen volver a encenderse. Con un Estado Islámico replegado en casi todas las zonas de conflicto y con su poderío armamentístico muy debilitado, la tensión en Oriente Medio había bajado su potencial amenaza a convertirse en un califato. Pero en los últimos días la presión de los diversos grupos rebeldes se hizo sentir, sobre todo en Siria e Irak.
Este último domingo 19 de marzo se registró una oleada de violencia sobre el este de la ciudad de Damasco, donde varias facciones de grupos rebeldes asociadas a grupos terroristas iniciaron una ofensiva sobre esta área.
Las fuerzas de la coalición siria junto a la Fuerza Aérea rusa realizaron un feroz bombardeo sobre las zonas de conflicto al este de Damasco, sobre el campo de Yobar. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (ODSH) informó sobre esta situación con bajas por el lado rebelde y donde la zona este estaba siendo asediada por los bombardeos del régimen sirio y sus aliados.
El ataque rebelde se inició el domingo y según fuentes oficiales se tomaron varios edificios, lo que provocó daños materiales en la zona. De todas formas, este lunes el ejército sirio avanzó sobre la zona para recuperar lo «perdido» durante el fin de semana. Además, se registraron fuertes ataques aéreos contra posiciones en el barrio de Yobar, como lo comunicó el titular de OSDH, Rami Abdel Rahman. El día domingo se registraron varios ataques del grupo denominado Frente Al Nusra, una facción del Grupo Al Qaeda que viene azotando a la ciudad de Damasco.
Finalmente, este lunes 20 se logró recuperar el este de la ciudad y en las últimas horas volvió la calma a la zona. De todas maneras, esto da indicios de que todos los rebeldes han iniciado una nueva etapa del conflicto en Siria y que podría ser una nueva escalada de violencia en la región.

¿Nuevo conflicto en Líbano?

Luego de la última incursión en 2006 por parte del ejercito israelí en el sur del Líbano, que costaron más de 1.000 vidas libanesas y más de 200 israelíes muertos, parece que el ejército hebreo se prepara para realizar una nueva entrada sobre territorio libanés, pero esta vez es para acabar con Hezbollah. Esta vez el objetivo será la agrupación y se hará en cualquier lugar del Líbano, sea en el sur o en Beirut.
Según advirtió el jefe del ejercito israelí, Gadi Eisenkot, «se avecina una nueva guerra contra Hezbollah». Estas palabras no caen para nada bien del otro lado de la frontera, donde hace muy poco tiempo se acaba de formar un nuevo gobierno. De esta forma, Israel advierte a Beirut que una guerra con Hezbollah se desarrollará en territorio libanés.
El mismo jefe del ejercito israelí afirmó que la guerra será contra ambos, tanto Hezbollah como el Estado del Líbano. Además, habló sobre el potencial del grupo libanés y que se están fortaleciendo sus capacidades militares y están operando al sur del río Litani. Por su parte, el ejército de Israel ya realizó varias maniobras militares.
El hecho de que Israel quiera atacar a Hezbollah reside en que temen una posible represalia por los conflictos que se disputan con Palestina. Por eso, y sumado a que se habría potenciado su armamento, más la llegada de Rusia a la región, suman factores para una incursión en suelo libanés.
Por si a Medio Oriente le faltaba con la situación en Siria, Irak, Afganistán y Yemen, ahora se podría sumar un conflicto que en el pasado ya fue muy sangriento y que amenaza con volver a generar un derramamiento de sangre aún mayor.