Una renovación energética

Con el objetivo de promover el uso de energías renovables y que las mismas alcancen a ser el 25% de las utilizadas en 2025, el Gobierno Nacional presentó el programa RenovAr por el que se convocará a licitación pública para la provisión de energía eléctrica a partir de fuentes renovables en el Mercado Eléctrico Mayorista mediante el desarrollo de proyectos para generar 1.000 megavatios de electricidad.
La inversión necesaria estaría en los 2.100 millones de dólares. Actualmente las energías renovables proveen el 1,8% de la demanda eléctrica nacional y el nuevo marco regulatorio para el sector se fija como meta elevar, progresivamente, la oferta hasta alcanzar un 4,5% en 2019 y un 25%, equivalente a 10 mil megavatios, en 2025.
En un acto en el Parque Indoamericano de Villa Lugano, el presidente Mauricio Macri sostuvo que Argentina se encuentra «en el comienzo de una etapa maravillosa» y dijo que hay que «llenar la Patagonia de molinos de viento para generar energía y trabajo», a la vez que reiteró el compromiso tomado por el país en la conferencia sobre cambio climático de París 2015, y afirmó que «el mundo entero está comprometido en la agenda de buscar alternativas para producir la energía que necesitamos».
Al hacer referencia a RenovAr, el mandatario les pidió a las empresas que «inviertan en este proceso» y señaló que «en pocos meses» espera «recibir muchísimas ofertas de todo el mundo» que serán analizadas y respondidas «con coherencia y seriedad».
Con el aumento de la generación de energías renovables se evitará «la emisión de casi 2 millones de toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera en forma anual, lo cual sería el equivalente a la contaminación de unos 900.000 autos», precisó Macri. Además sostuvo que «estamos entre los principales países para generar energía solar y energía eólica» y afirmó que este tipo de procesos «permiten ahorrar cientos de millones de dólares en importación de combustibles y generar trabajo y energías renovables». También se comprometió a solucionar la actual situación de crisis energética con el establecimiento de «marcos regulatorios para que se vuelva a invertir».
Por su parte el ministro de Energía, Juan José Aranguren, remarcó que esta iniciativa no se había «hecho en la Argentina y además estamos haciendo nuestro aporte a la mitigación del cambio climático, logrando reemplazar hidrocarburos fósiles que son contaminantes por una energía mucho más limpia».

De qué se trata el proyecto

Con la Ley 27.191 se estableció el Régimen de Fomento Nacional para el uso de Fuentes Renovables de Energía y se declaró de interés nacional la generación de energía eléctrica mediante el uso de fuentes de energía renovables, como así también la investigación para el desarrollo tecnológico y la fabricación de equipos con esa finalidad.
La implementación de estos proyectos son el resultado de la Ronda 1 del Programa RenovAr mediante la apertura del Proceso de Convocatoria Abierta para la contratación en el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM). Se estima que se fortalecerá la producción energética del país a la vez que se crearán unos 6 mil puestos de trabajo.
La Resolución 71 del Ministerio de Energía da comienzo a la etapa denominada «Ronda 1», que da inicio a un sistema de licitaciones para adjudicar un mix de proyectos de energías renovables. La cantidad de potencia para esta etapa inicial es de 1.000 megavatios conformados por las tecnologías: solar, biomasa, mini-hidroeléctrica y eólica. Las distintas clases se dividirán de la siguiente forma: 600 megavatios eólicos, 300 solares, 65 de biomasa, otros 20 de pequeños aprovechamientos hidroeléctricos y 15 de biogas.
Además, la resolución especifica que los proyectos adjudicados serán «objeto de un Contrato del Mercado a Término denominado Contrato de Abastecimiento de Energía Eléctrica Renovable (Contrato de Abastecimiento)».
El Gobierno también dictó la Resolución 72 que establece el «Procedimiento para la Obtención del Certificado de Inclusión en el Régimen de Fomento de las Energías Renovables». Se prevé una licitación pública para el desarrollo de proyectos y en sus considerandos la norma señala que «el uso de las fuentes renovables con destino a la producción de energía eléctrica constituye una política de Estado de largo plazo con aptitud para asegurar los beneficios de las energías limpias para el país y sus habitantes».
Según la cartera energética, «la expansión del uso de fuentes renovables de energía destinadas a la producción de energía eléctrica tiene consecuencias favorables para el país ya que implica, entre otras, una mayor diversificación de la matriz energética nacional, la expansión de la potencia instalada, la reducción tanto del consumo de combustibles tipo fósil como de la emisión de gases de efecto invernadero y la contribución a la mitigación del cambio climático».