Una vida bien vivida

Si existió la personificación de la frase “Sexo, drogas y rock & roll”, seguramente fue en Lou Reed, padre de toda influencia rockera y del pop. Gran compositor, cantante y guitarrista de rock alternativo. Rodeado de arte y cultura, supo armar su camino y pasar a ser el más grande entre los grandes.
No tuvo comienzos gloriosos. Nacido en el seno de una familia de clase media en Brooklyn, el 2 de marzo de 1942, su sexualidad ya estaba designada. A los 14 años se definió como bisexual, elección que le valió algunas estadías en el psiquiatra, incluso varias sesiones de electroshock para “arreglar su problema sexual”. A todas sus experiencias les dedicó una canción. A esta vivencia le dedicó el tema “Kill your sons” del disco “Sally can’t dance” de 1974.

En su juventud tuvo varias bandas y sus influencias eran el rock puro, el rhythm y el blues, aunque más tarde incursionó en el free jazz y la música experimental.
En su paso por la Universidad de Syracuse, en los ‘60, se cruzó con el poeta Delmore Schwartz, quien le abrió paso a nuevos mundos. Fue allí donde adquirió la pasión por escribir y las ganas de incurrir la “Gran Novela Americana” en un disco, es decir, “trasladar la sensibilidad de la novela al rock”. Fue así como lo llevó literalmente a cabo en 2003. Editó el 21° disco solista doble llamado “The Raven” (El Cuervo), basado en el cuento más popular de Edgar Allan Poe.

En la universidad participó en varias bandas de rock y allí conoció a Sterling Morrison, a quien más tarde convocó para su grupo más importante.
En 1964 se mudó a New York y trabajó como compositor para Pickwick Records, donde conoció a John Cale con quien formó una nueva banda llamada The Primitives, para promocionar “The Ostrich”, el single de Reed.

Como ambos músicos se llevaban muy bien, quisieron armar su propio grupo y convocaron a un vecino de ellos, Angus MacLise; y al amigo de Reed, Morrison. Con esta formación crearon la banda The Warlocks, que luego pasaron a llamarse The Falling Spikes, y que dieron a conocer a través de su única cinta temas tan controversiales para 1964, como sexo y drogas, que no tuvieron el resultado esperado. De esta banda se popularizó el tema “Heroin”, aunque muchos lo relacionan más con su banda posterior.

Un día, Jim Tucker, amigo de Sterling y Lou, encontró en la calle un libro sobre sadomasoquismo de Michael Leigh titulado “The Velvet Underground” (“El terciopelo clandestino”). Así nació la banda glam más popular de Reed.
The Velvet Underground fue abordada por un promotor llamado Al Aronowitz. Cuando el grupo aceptó una oferta de 75 dólares para dar un show teloneando a otra banda de su propio manager, The Myddle Class, MacLise dejó el grupo acusando al resto de comercializarse, y fue reemplazado por Maureen Tucker, hermana de James.
Foto 02Después de ese concierto, Aronowitz les consiguió un contrato para tocar como banda residente en un local llamado Café Bizarre. El maestro del Pop Art, Andy Warhol, fue llevado a ese establecimiento por el director de cine Paul Morrissey para conseguir un grupo de rock para La Factory, su estudio de arte, donde han pasado músicos y diversos artistas del under. Dos días después la banda fue echada del Café.
El famoso artista plástico era “el dueño de la movida, no solo de arte tradicional. Él manejaba la cultura”, cuenta el periodista cultural Juan Manuel Caravello. Y agrega, “Fue Warhol quien armó la Velvet Underground”. John Cale, Sterling Morrison, Maureen Tucker y Lou Reed eran los protegidos de Andy y se sentaban en su mesa en un bar de Chelsea, el barrio más artie de Manhattan. “Y llegar a la mesa de Warhol era groso”, dice Caravello.
Una vez que Warhol se convirtió en el manager de The Velvet, en 1966, se llegó a la conclusión en la Factory que la modelo y artista Nico debía cantar junto a la banda. John y Lou no estaban cómodos con la idea pero la aceptaron de todas formas, y así pasó a llamarse The Velvet Underground & Nico. Andy Warhol, que también generaba contenido cinematográfico, los filmó y creó “The Velvet Underground & Nico: a symphony of sound”, un video que proyectaron en todos sus shows mientras la banda tocaba.

Durante 1966, Angus MacLise volvió brevemente a la banda cuando Reed sufrió una hepatitis que le impidió tocar en algunos conciertos ya programados. Durante esos shows, Cale cantaba y tocaba el órgano, y Tucker tocaba el bajo. Algunas de estas presentaciones fueron editadas en discos piratas y son los únicos registros de la banda con MacLise.
El primer disco de la banda con la modelo tardó casi un año en ser editado por las políticas de las discográficas. A pesar de que la asociación con Warhol les garantizó un alto perfil, las letras de los temas no eran aceptadas por las empresas porque no encontraban maneras de comercializarlas. Finalmente, Warhol les consiguió un contrato con el sello Verve, subsidiario de MGM. Nuevamente, cuestionaban la continuidad de Nico con la banda, pero otra vez se reafirmó en el grupo.
Foto 04El disco fue editado en mayo de 1967 con un célebre diseño de portada de Warhol y con el nombre “The Velvet underground & Nico”, pero solo alcanzó el puesto 171 en las listas.
1968 fue un año bravo para la banda. Lou se cansó de las imposiciones de Andy y lo echó como manager. Acto seguido echó a Nico, quien nunca le convenció su participación.
Ese mismo año se editó el segundo álbum de la banda, “White Light/White Heat”. Este disco fue más crudo que el anterior, con mucha distorsión.
Seguían sin tener el éxito esperado y esto hizo que la banda entre en crisis, sobre todo entre Reed y Cale. El primero le propuso al resto de la banda elegir entre él o John, para poner fin al conflicto de intereses, y la banda se fue con Lou. El que reemplazó al galés fue el bajista Doug Yule.
Se sospecha que Reed siempre celó a Cale, dado que tiene un prodigioso talento. Antes de los 5 años de edad, John ya estudiaba música clásica y a los 8 ya componía.
A principios de 1970, la banda fue echada del sello discográfico de MGM porque el nuevo director decidió terminar con todas las bandas hippies y con contenidos sobre drogas. Por tanto, The Velvet se unió al sello Atlantic Records.
La banda tomó un rumbo musical más tranquilo, más dócil, dado que el único que poseía la influencia de lo experimental era Cale. Este estilo musical lo marcó para siempre a Reed.
Maureen Tucker había quedado embarazada, y debido a tal acontecimiento en los recitales fue reemplazada por el mismo Yule, o por el ingeniero Adrián Barber, el sesionista Tommy Castanaro y Billy Yule, el hermano de Doug.
Uno de los temas más conocidos de esta etapa de la banda es “Sweet Jane” del disco “Loaded”.

Luego, en agosto de 1970, Lou decidió abandonar la banda para volver a la casa de sus padres en Long Island. Trabajó como mecanógrafo en la empresa contable de su padre, pero al año siguiente firmó para el sello RCA y grabó su primer disco solista en Inglaterra llamado “Lou Reed” que, como estaba acostumbrado, no tuvo éxito. En él rememoraba varios temas de su anterior banda.
Foto 08En Inglaterra conoció a David Bowie y se hicieron grandes amigos. Grabó su segundo disco, “Transformer” (1972), con la producción y acompañamiento en coros de su nuevo amigo. Este álbum solista tenía letras menos comprometidas y era más glamoroso, aunque temas como “Walk on the wild side” o “Perfect day” fueron los grandes éxitos del disco y fueron emitidos por los medios sin censuras. El primero describe a los personajes que pasaban por la Factory de Warhol, y el segundo habla de la adicción a la heroína que poseía Reed.

En 1973 decidió volver a lo clásico, a escribir letras de situaciones sociales fuertes que en aquellos tiempos no se trataban hasta la llegada del Punk a fines de los 70 y principios de los 80. Ese mismo año nació su tercer disco solista, “Berlín”. La canción con el nombre homónimo al disco trata de una trágica historia de amor entre dos drogadictos. Otra de las canciones habla sobre violencia, como “Caroline says”, o aborda temas de prostitución como en  “The kids”.

La adicción a las drogas de Lou Reed cada vez era más fuerte y su música cada vez más sombría. Desde el cuarto disco solista decidió no estar atado a sellos discográficos porque ellos querían que él vuelva a discos como “Transformer” y el músico buscaba otra cosa. Hasta que a principio de los años 80 dejó las drogas. Editó el séptimo disco solista “The blue mask”. Se casó con la diseñadora Sylvia Morales, pero se divorciaron 10 años más tarde.
Foto 03En 1987 falleció Andy Warhol tras una operación rutinaria, y su muerte hizo reflexionar a Lou hasta el punto de amigarse con John Cale y comenzar a tocar nuevamente juntos recordando viejas épocas. En ese momento lograron el disco “Songs dor Drella”, un repaso por la vida del gran maestro del Pop Art, con la voz quebrada de Reed recordando momentos con su antiguo manager.
Dos años más tarde lanzó un disco solista con gran éxito, “New York”. En él sus letras eran más politizadas contra los problemas que rodeaban la ciudad, y ni el Papa Juan Pablo II se salvó.
En “Dirty boulevard” explica las diferentes clases sociales de esta ciudad.

Ya a finales de los años 90, empezó a relacionarse con la polifacética artista Laurie Anderson. Se casaron en 2008 y siguieron juntos hasta el fallecimiento del músico.
Foto 07En 2002, el músico y su última mujer realizaron una gira por Europa con el espectáculo “Words and Music”, que se basaba en música con poesía, luz y color. Y cinco años más tarde, influenciado por su nueva vida de yoga y paz, lanzó su último disco solista “Hudson River Wind Meditation”.
En los últimos años participó en discos o canciones de varias bandas famosas. Cantó en el tema “Tranquilize” de The Killers en 2007. Tres años más tarde,  grabó a dúo con Damon Albarn, líder de Gorillaz, la canción «Some kind of nature». Al año siguiente, Lou Reed grabó junto a Metallica el disco “Lulú”, que está inspirado en la obra de teatro “Lulú” de 1937 del dramaturgo alemán Frank Wedekind sobre la vida de una bailarina que fue víctima de abusos sexuales.

Última foto tomada el 21 de septiembre por el fotógrafo Jean Baptiste Mondeo, Superstudio, New York.
Última foto tomada el 21 de septiembre por el fotógrafo Jean Baptiste Mondeo, Superstudio, New York.

En los últimos años Reed se dedicó a la fotografía y en mayo de 2013 fue sometido a un trasplante de hígado, pero no fue suficiente para solventar los problemas de salud que acarreaba.
Hace una semana que murió, el 27 de octubre, pero permanecerá vivo en los corazones de sus fans, en los clics de YouTube, en el play al poner sus discos o en los acordes de aquellas bandas que logró influenciar.