Lo mejor y peor de la cuarta temporada de "Black Mirror"

«Black Mirror» es una serie de televisión británica creada por Charlie Brooker. Su tema central gira en torno a la relación entre los humanos y la tecnología en el futuro. Esta serie de antología se instaló como una marca registrada por su oscuridad y la capacidad, en cada capítulo, de dejarnos en un shock ultra satisfactorio. De lo mejor que se puede esperar de una serie.
Precisamente, «Black Mirror» estrenó hace poco su cuarta temporada y en lo que queda de la nota nos valdremos de los spoilers para tratar de generar un análisis abierto al debate de cada capítulo. Yo te avisé.

USS Callister

Desde mi parecer, de lo mejorcito de la temporada.
El giro en el cambio de punto de vista del de Daly al de Nanette es efectivo y sorprende. Otro gran punto a favor es el reproducir el universo colorido y estridente de «Star Trek» e implantarle el terror puro que impone Daly en este universo (el momento en el que deja sin rostro a Nanette logra desesperar a cualquiera). Y, por último, la genial actuación de Cristin Milioti y el tono cómico cierran un capítulo bastante redondo y entretenido.
Quizás le falta algo de contundencia en el discurso o simplemente carece de ese costado solemne al que nos tiene acostumbrados la serie (en un buen sentido).

Arkangel

El segundo capítulo tenía una propuesta muy interesante, con una dirección impecable pero… ¿alcanza? El capítulo resultó decepcionarme a medida que lo veía. Cada concepto que ofrecía quedaba a medio desarrollar. La transición de la niña al descubrir la violencia sin control parental me pareció un punto fundamental que, al ser casi obviado, terminó por parecerme inverosímil.
¿Cuántos de nosotros podríamos resistir videos ultra violentos mirando sin pestañear como esa niña pequeña lo hacía? Y, en caso de poder hacerlo, ¿por qué? ¿Cómo la afectará esto? Nada, el capítulo sigue adelante como si nada.
Cuando Sara (que no parece una chica de quince años) rompe el dispositivo Arkangel creo que la mayoría asociamos que esto podría afectar su implante provocando algo irreparable como, por ejemplo, que quedara en modo control parental y enloqueciera hasta llegar a un extremo típico «Black Mirror» y termináramos por ver a Sara extrayendo el chip de su cabeza con un cuchillo (un ejemplo exagerando al máximo).
Pero esa salida de violencia contra la madre queda absolutamente forzada por la casualidad de «se puso solo el control parental justo en ese momento y se salió solo justo después». ¿En serio?
El capítulo está lleno de estas casualidades y situaciones forzadas e incoherencias pequeñas y grandes que lo hacen, para mí, una gran decepción.

Crocodile

Este es el capítulo que realmente no puedo creer de esta temporada.
Lo primero que me hizo ruido es que el comienzo tenga el mismo concepto de la película «Contratiempo» y no quiero decir que hubo una copia para nada… pero fue el primer indicio de que el capítulo iba a estar colmado de clichés y grandes casualidades que resuelven gran parte de la trama. Era una constante, ¿en serio va a decir eso? ¿En serio se le va a quedar el auto? ¿En serio se va a destapar la cara ahora? ¿En serio nadie vio el cadáver que trasladó por todo el hotel?
Principalmente, lo que más me inquieta de estas mil casualidades es que dejan una gran incógnita que no puedo responder en mi cabeza. El capítulo plantea que para obtener los recuerdos de las personas con el aparato deben preguntarles sobre ellos y estimular los recuerdos de un momento en particular. ¿Cómo lograron hacer eso con el cobayo? No digo que sea imposible, solo que no me parece tan obvio ni lógico.
Y, por último, lo que me sorprende más es que la interacción con la tecnología no influye en el capítulo. Aparte de que se da hacia el final, solo refuerza lo que ya se veía, Mia se volvió una asesina. Cabe mencionar que el asesinato de Rob es muy raro y este encuentro no añade una gran variación.

Hang the DJ

Una bocanada de aire fresco. Otro capítulo redondo pero esta vez con mucho más contenido. Las actuaciones de Georgina Campbell y Joe Cole son muy buenas. El desarrollo largo, desgastante y angustiante, nos carga de intriga para que el giro del final sea, además de satisfactorio, un instante que resignifica todo. Algunos capítulos de esta temporada son pretenciosos en la complejidad tecnológica y carecen de un desarrollo contundente. Se ahogan en sus propias pretenciones y complejidades. «Hang the DJ» es la prueba de que la simpleza del argumento, cuando hay coherencia y una idea firme, hacen a la contundencia.

Metalhead

La actriz Maxine Peake lleva muy bien el drama y la angustiosa persecución de este perro robótico.
Buena intriga, las imágenes en blanco y negro son acertadas, contribuyen con el minimalismo y el aire post apocalíptico. Sin embargo, la decisión de no decirnos de dónde salieron esos perros, por qué cazan humanos y qué está pasando en este mundo es, al menos para mí, cien por cien desacertada. No obtener ninguna respuesta, ni una punta para idear hipótesis, me quita mucho interés en lo que acabo de ver.
Por otro lado, ese final y esa caja de peluches me vuelven loca y terminan por quitarme interés en el capítulo además de dejarme una sensación de que todo fue ridículo. Arriesgaron con la falta de historia de fondo e hicieron agua.

Black Museum

Lo mejor de la temporada, sin dudas, está dentro de este capítulo.
Cargado de easter eggs de otros capítulos, la historia tiene en sí misma tres historias que son puro «Black Mirror». Oscuridad, extremismo, violencia e ideas muy originales sobre la tecnología y la interacción con la idiosincrasia humana.
Se mencionó en su momento la idea de una serie que se desprenda de este capítulo por el evidente potencial que desborda. Y esperemos que así sea.