Chinos con más hijos

En un fuerte giro respecto de su histórica política poblacional, el gobierno chino permitirá que las parejas tengan más de un único hijo, tal como estaba establecido desde el año 1979. La medida ya había tenido una flexibilización en 2013 cuando se permitió a los matrimonios en el cual al menos uno de los dos progenitores fuera hijo único, tener dos hijos. Aquellas parejas que violaban la norma de un hijo enfrentaban una variedad de castigos, desde multas y despidos de sus empleos hasta abortos forzados.

La decisión fue adoptada luego de que el Comité Central del Partido Comunista culminara la reunión plenaria de cuatro días en la que han aprobado el 13º Plan Quinquenal, un documento que se conocerá en 2016 y que contiene los lineamientos principales de la política económica y social del país para los próximos cinco años (2016-2020).

Es importante señalar que de los comprendidos en las normas para tener más hijos, unos 11 millones de personas, tan solo 1,5 millones habían pedido permiso a las autoridades hasta mediados de este año.

La medida de un solo hijo fue instaurada para controlar la natalidad y evitar el excesivo crecimiento de la población china y sus efectos perjudiciales como saturar el uso de recursos vitales, como por ejemplo el agua.

El gobierno de Beijing calcula en 400 millones los nacimientos que esta política ha impedido. Sin embargo, algunos analistas señalan que ha tenido un enorme costo social con millones de esterilizaciones y abortos. Además ha provocado una enorme disparidad entre el número de hombres y mujeres a la vez que muchos hombres han tenido problemas para encontrar pareja.

Otra de las consecuencias es el envejecimiento de la población. Actualmente 30% de la población del país tiene más de 50 años, algo que muchos etiquetan como de «bomba de relojería demográfica», ya que esto generaría un aumento de los costes sociales y la caída del número de trabajadores.

Wang Yukai, profesor en la pekinesa Academia de Gobernanza de China, dijo que este anuncio «muestra que el partido quiere tomar medidas tan pronto como sea posible, y que no hay tiempo que perder para que China modifique su política de población. Los líderes quieren la nueva política ya».

Según Wang, estas flexibilizaciones son parte del programa del presidente Xi Jinping de transformar la economía del país e implementar un sistema que sostenga un crecimiento más equilibrado, en la que la dependencia en las exportaciones de un paso a una economía impulsada por los servicios, el consumo interno y la innovación.