Extranjeros y desconocidos

«¿Como sobrevive al exilio un hombre criado entre el islam y el marxismo, mientras en su tierra se desarrolla una revolución liderada por mujeres? ¿Por qué una argentina se enamora de una utopía en la otra punta del mundo y es capaz de dar su vida por ella?». Estas son las preguntas iniciales que se realiza Alfonso Gastiaburo en «Extranjero», su más reciente documental, estrenado el pasado 20 de octubre, en el que recorre y descubre por qué los kurdos comprenden la sociedad con más personas (más de tres millones) que no cuentan con un Estado propio.

Precisamente, para descifrar este escenario geopolítico, los kurdos habitan sobre más del 80% del petróleo que se obtiene en los territorios de la República Islámica de Irán, Siria, Irak y Turquía.

De esta manera, «Extranjero» indaga en el pasado y presente de Che Cetin, quien debió escapar de su tierra por persecución ideológico política y a la que no puede volver. Este joven kurdo, además, acerca otros dos testimonios para conocer la historia de Kurdistán, «silenciada» (o tergiversada, según los intereses en cuestión) en esta parte de Occidente: por un lado, Natalia Benavídez conoció el amor y se fue a vivir a Estambul donde vio en carne propia la lucha rebelde. Por otra parte, Remzi Pamukcu es un actor migrante en Rosario, con experiencias similares a las de Che Cetin.

Con la globalización presente en múltiples ocasiones (un kurdo tomando mates que habla en perfecto lunfardo y viste una remera de Brasil grafica esta idea) y desde la capital santafesina, «Extranjero» se debate entre la posibilidad de viajar al territorio bajo peligro en Rojava, desnudar las capas de una historia tan rica como desconocida y responder el por qué algunas luchas nos son tan ajenas y otras se vuelven propias.