¡Gracias, Negro!

Horacio Fontova fue, es y será para siempre sinónimo de alegría y criterio. Su multifacética carrera, plagada de ingenio, rebeldía y humor, tuvo un tímido inicio como ilustrador en la mítica «El Expreso Imaginario» que le permitió explorar un universo que luego llevaría a la música, la televisión, el teatro y el cine.

Son muchos los hitos de su larga trayectoria, con el éxito de Fontova y sus Sobrinos y esa pegadiza «Me Siento Bien», entre muchas otras creaciones, que luego una farmacéutica la explotaría en spots publicitarios. Su talento lo acercó a los públicos.

Asimismo, la televisión con «Peor es Nada» y esa dupla sin igual con Jorge Guinzburg (con Sonia Braguetti que provocaba a los invitados, una mujer seductora con un bigote aún más seductor), le permitieron transgredir límites impensados por el medio, además de obras míticas como «Jesucristo Superstar» o «Hair» y hasta la posibilidad de reemplazar a uno de los integrantes de Les Luthiers en una gira española.

También contó con algunas participaciones en cine que comenzaron, curiosamente por este contexto, en la adaptación de «La Peste» de Luis Puenzo, para seguir con algunos roles en otras producciones, poner su voz en «Metegol», participar de «El Padre de mis Hijos» de Martín de Salvo y en la aún inédita «Soy Tóxico» de Pablo Parés y Daniel de la Vega, que nos devolverá a la pantalla su imagen y el recuerdo del «Negro», una figura clave en la cultura argentina y rioplatense que este lunes 20 de abril brillará desde otro lugar.