La agonía de Yemen no termina

En el boletín publicado este lunes, la Organización Mundial de la Salud (OMS), con sede en Ginebra, anunció que en Yemen más de 70 mil personas, entre ellas más de 9 mil niños, han muerto en la guerra que se libra en el país ubicado en el sur de la Península Arábiga.

Basada en la actualización de los datos en las estadísticas procedentes de hospitales y centros de asistencia primaria, la OMS advierte la cantidad de víctimas mortales. Además, señala que las cifras probablemente sean en realidad mucho más elevadas.

Orígenes del conflicto

Este tiene sus inicios en un levantamiento que siguió a la Primavera Árabe, en 2011, que forzó al entonces presidente Ali Abdullah Saleh a entregar el poder al vicepresidente Abd Rabbu Mansour Hadi.

Desde marzo de 2015 hasta octubre de 2018, los hospitales registraron casi 10 mil víctimas mortales y más de 60 mil personas resultaron heridas en acciones de combate. En marzo de 2015 una coalición liderada por Arabia Saudí comenzó a bombardear posiciones de los insurgentes, pero también cayeron bombas en mercados, prisiones, barcos civiles y hospitales. El Alto Comisionado de Derechos Humanos estima que la mayoría de las víctimas se produjeron debido a estos bombardeos.

La transición política, que se suponía iba a llevar estabilidad al país, fracasó y provocó una complicada lucha de poder entre los simpatizantes de Saleh, el movimiento rebelde de los hutíes y las fuerzas de Hadi.

Atacar sin códigos

Desde la escalada del conflicto actual en 2015, las instalaciones sanitarias de Médicos Sin Fronteras (MSF) han sido golpeadas por ataques aéreos en repetidas ocasiones, con consecuencias mortales y que han cambiado las vidas de los pacientes, el personal y las comunidades que dependen de los servicios brindados por las instalaciones. El personal de MSF ha sido detenido y baleado. Se colocó un dispositivo explosivo en uno de los hospitales, y en el ataque quizás más atroz, un grupo de hombres armados ingresó en uno de los hospitales apoyados por MSF y dispararon a un paciente mientras estaba acostado en la mesa de operaciones. Milagrosamente sobrevivió.

Escenas como las que sufren Médicos sin Fronteras viven diariamente las víctimas del conflicto y las partes que en solidaridad llevan su ayuda.

Los mayores perdedores en este conflicto han sido los civiles. Los bombardeos aéreos letales y continuos han causado miles de muertos, una hambruna inminente, brotes de enfermedades mortales y una de las crisis humanitarias más graves de años recientes.

En la actualidad se están llevando a cabo conversaciones de paz en Suecia. Sin embargo, en Yemen las principales partes involucradas en el conflicto (Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Estados Unidos y el Reino Unido) son también los principales donantes de asistencia humanitaria a través de las Naciones Unidas, que proporcionaron aproximadamente el 71% de la asistencia en 2018.