Más que un sueño hermoso

El pasado 8 de marzo recordamos a María Luisa Bemberg en una crónica que recorría su vida y sus películas atravesadas, siempre, por una impronta feminista. Hace algunos días, el director Tomás De Leone («La muerte no duele», «El aprendiz») estrenó en CINEAR su documental «Un sueño hermoso» sobre Alejandra Podestá, la protagonista de la última película de la directora. Lee «Feminismo, cine y María Luisa Bemberg» acá.

El último film de María Luisa fue «De eso no se habla» en el año 1994. La protagonista era una mujer diferente, pequeña, «enana». Y su historia atravesada por momentos de brillo y oscuridad se entrecruzaba con la historia de Alejandra Podestá, la joven que interpretó a este personaje.

La película se divide en bloques de sentido para contar esta historia que ocupa un lugar lateral en la historia del cine argentino, como menciona el director. El primero de esos grandes bloques es María Luisa Bemberg, la directora que hace esta película con un sentido que va a ser trascendental hacia afuera para el cine tanto como hacia su interior en Alejandra. Tomás de Leone nos cuenta que «la vida de Alejandra se lee en clave ‘bembergiana’, entonces, por eso para mi era tan importante iniciar la película con María Luisa, como un mapa de lectura para el espectador. Bemberg es el filtro para ver las cosas, en este caso».

Luego, en el resto de los bloques, van directamente hacia el núcleo de la protagonista y se narra a través de entrevistas a quienes participaron del hecho que fue la película. Lita Stantic, Alejandro Maci, Berta Goldemberg, Jorge Goldemberg, Felix Monti, Juan Carlos Macias, Graciela Galán, Juan Carlos Rodríguez, Cristian Medrano, Beatriz Colavita y Eduardo Stefano son los nombres que aparecen y aportan puntos de vista que a veces se encuentran y por momentos se oponen, porque la vida de Alejandra (de alguna manera) tiene un clima de mito que se nutre de la falta de certezas. «A mí me atraen las historias que tienen baches de información, que no están reconstruidas del todo. Siento que ahí se cuela el misterio», añade el director.

Una chica que casi no salía de su casa, mantenida casi en secreto por su madre, de repente se ve protagonista de una película en la que se casa con Marcelo Mastoianni, dirigida por una directora multipremiada. A partir de imaginar la perspectiva de Alejandra Podestá, la película toma una dimensión aún más onírica de lo que ya es. Y cuando se desvanece este «sueño hermoso», todo deviene en tragedia.