Por qué es importante fracasar

«No le temas al fracaso sino al miedo de no haberlo intentado», afirmaba Roy T. Bennett. Durante la mayor parte de nuestras vidas la sociedad nos enseñó que el fracaso es algo que hay que temer y evitar a toda costa.

La realidad es que si tenés sueños y metas, el miedo al fracaso es probablemente el mayor obstáculo que te impide vivir la vida en tus propios términos. Para poder superarlo, deberás realizar algunos cambios en tu mentalidad si deseás avanzar y hacer verdaderos progresos.

Darte cuenta de tu miedo al fracaso será mucho más fácil para vos cuando aprendas a aceptarlo como parte del proceso.

Después de adoptar la mentalidad correcta, podrás avanzar con confianza. En lugar de temerlo, vas a aprender a aceptar y agradecer el fracaso en tu viaje y así evolucionar en todas las áreas de tu vida.

Estás a punto de aprender por qué aceptar el fracaso es uno de tus mayores activos cuando se trata de alcanzar el éxito y te vas a impresionar con los resultados.

Por estos motivos, compartimos 5 razones del por qué el fracaso es importante para lograr el éxito.

La perfección es imposible

No importa si mirás a un hombre de negocios exitoso o a un atleta profesional, creer que las personas exitosas son inmunes al fracaso es muy fácil. Pero lo que la mayoría de la gente ve es solo la punta del iceberg. Los individuos que alcanzan sus metas fracasan más veces que aquellos que no lo hacen.

Antes de la fama y la gloria, atletas profesionales y ricos empresarios tuvieron que comenzar en alguna parte. Estas son personas en quienes buscamos inspiración. Pero la mayoría de ellos enfrentaron más obstáculos de los que te imaginás.

Incluso después de que alcanzan sus metas, las personas con talento todavía fallan de vez en cuando. En lugar de prestar atención a cada fallo, tratá de enfocarte en el panorama general. Los reveses y errores que vas a encontrar son los peldaños que te van a permitir vivir la vida que siempre deseaste.

La perfección es imposible de alcanzar. Habrás recorrido un largo camino cuando hablamos de reducir el estrés cuando aceptes el fracaso.

El fracaso es la forma más rápida de aprender

Para intentar adquirir una nueva habilidad, podés leer docenas de libros, ver cientos de videos y al final vas a obtener una comprensión básica de cualquier oficio. Esta información será suficiente para comenzar pero no te va a ayudar a alcanzar el nivel de éxito deseado.

Aquellas que deseen dominar una habilidad deberán utilizar su conocimiento y adquirir experiencia personal antes de poder notar alguna mejora positiva. Al postergar la toma de decisiones debido al miedo al fracaso solo retrasará el proceso de aprendizaje.

«El fracaso es simplemente una nueva oportunidad de empezar de nuevo, esta vez de forma más inteligente», aseguró Henry Ford.

Con cada falla vas a obtener un valioso conocimiento que te ayudará la próxima vez que lo intentes. Fallar cambiará la forma en que ves cada evento y jugará un papel importante en tu capacidad para ver el valor de cada error.

Si deseás dar un paso más allá, usá un diario para anotar al menos una cosa que hayas aprendido al aceptar el fracaso.

El fracaso construye fuerza interior

Al igual que un músculo, tu capacidad de aceptar el fracaso y seguir avanzando te fortalecerá con cada uso.

Cada vez que dejes que el miedo al fracaso dicte tus acciones, tu fuerza de voluntad pierde un poco de impulso. Si tu objetivo es demasiado complicado como para intentarlo, entonces dividilo en otros más pequeños que sean más sencillos de conseguir. Es importante, sin embargo, que no hagas tus metas demasiado fáciles.

Si lo hacés entonces no te vas a beneficiar de este método y vas a perder el tiempo. En cambio, cada paso que des debe estar ligeramente fuera de tu zona de confort. Este equilibrio te va a ayudar a mejorar tu coraje sin que te cause estrés.

«Un poco más de persistencia, un poco más de esfuerzo, y lo que parecía un fracaso sin esperanza puede convertirse en un glorioso éxito», nos compartió Elbert Hubbard.

Como un proceso a largo plazo, gradualmente vas a notar una mayor motivación, coraje y entusiasmo. Trabajando juntos, estos factores te van a mantener en el camino correcto y vas a alcanzar tus objetivos más rápido de lo que crees.

El fracaso te hace ver la realidad

Al comienzo de cualquier viaje muchas personas cometen el error de tener expectativas poco realistas sobre sus habilidades actuales. Este problema evitará que puedan progresar porque no van a saber desde qué punto comenzar. Por ejemplo: quienes quieran aprender a jugar golf podrían tomar una clase avanzada si sobrestiman su nivel de habilidad actual pero, sin saber lo básico, esa clase no les va a hacer ningún bien.

Incluso una vez que te puedas convertir en un experto, vas a tener más que aprender. Nunca vas a dejar de mejorarte. Cuando sobreestimás tus habilidades, la picadura del fracaso se intensifica. Ser objetivo con vos será difícil, lo que te va a impedir avanzar.

Cada error te va a servir como un recordatorio de dónde estás parado y sacará tu cabeza de las nubes. Si aprendés a ver el fracaso como una forma de medir tu efectividad, vas a poder usarlo en tu beneficio.

El fracaso te hace atractivo

Aunque la gente a menudo ve la perfección como un método para hacerse más atractivo, lo contrario es igual de cierto. Cuando otros te ven como alguien perfecto, esa percepción crea un nivel de separación. Así que la envidia y la inseguridad pueden afianzarse fácilmente en ellos.

Las personas suelen idolatrar a sus celebridades favoritas y esto los pone nerviosos y tímidos si alguna vez tienen la oportunidad de conocer a sus ídolos. Este temor hace que sea difícil tener una conversación real y formar una conexión significativa con los demás.

En estos casos, las celebridades no van a tener mucho que ganar porque las personas con las que hablan no tienen expectativas realistas. En lugar de hacerte diferente, el fracaso te hace humano.

A menos que alguien sea profundamente inseguro o quieran vengarse, aceptar el fracaso te va a servir para ser más accesible para los demas. De hecho, cuando dos o más personas comparten el mismo desafío, se crea una situación ideal para formar un vínculo duradero.

De esta manera, a modo de conclusión podemos decir que, cuando dejás de lado todos los demás factores, superar el miedo al fracaso consiste en darse cuenta de que no tenés nada que demostrar a nadie. Debido a que el fracaso no es evitable, tratar de escapar es una batalla que nunca vas a ganar. No importa cómo te vas a sentir, ya te armaste con las herramientas que necesitás para convertir tus sueños en realidad. Así que es hora de que salgas y comiences a aceptar el fracaso, ya que no es tan malo como te gustaría pensar.

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