Inocencia, oscuridad y "Un viaje a la Luna"

«Un viaje a la Luna» es el primer largometraje de Joaquín Cambre. El director, que realizó más de 200 videoclips y comerciales, llegó a la pantalla grande con una propuesta más que atractiva. Ganó el premio a Mejor Ópera Prima en el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y se estrena en todos los cines el próximo 1º de marzo.

Coming of age

Un género no muy explorado para el cine nacional, implica el transito de un personaje de la niñez hacia la adolescencia y la adultez.
En «Un viaje a la Luna», además, hay un trauma que forma parte de la personalidad y que marca al protagonista en su forma de transitar este camino. Una obsesión que lo guía, un grupo familiar del que hay que distinguirse y la posibilidad de un primer amor. Tomás es tímido y algo ermitaño. Trata de soportar a su familia con la que no conecta. Se comporta extraño, frecuenta un psiquiatra y consume una medicación. Mientras tanto, él solo quiere escapar… hacia la Luna.

Inocencia y oscuridad

Ángelo Mutti Spinetta encarna a Tomás, el personaje principal, y de su gran representación destaca su mirada, perfecta para la ocasión, llena de misterio entre la ternura y la oscuridad que esconde el personaje.
Asimismo, en la etapa de adolecer Tomás se traslada de una punta a la otra entre los límites de lo inocente y lo peligroso de su mente y su imaginación. Y hay que entender que nosotros somos espectadores, enteramente, de su punto de vista.

Momentos videoclip

Queda a las claras la influencia del trabajo previo del director. Varias secuencias musicales se completan con un despliegue visual hipnótico que se relaciona mucho al ritmo de videoclip. Son momentos hermosos y ultra satisfactorios que respiran en la película que, si bien es interesante y redonda en su relato, se puede tornar un poquito larga.