«Una dictadura empresaria, eclesiástica y militar»

Este viernes 24 de Marzo conversamos en el Noticero con Lorna Milena, escritora e integrante de la Asamblea Desobediente, un colectivo de familiares de genocidas que ejercieron la violencia, asesinatos y desapariciones forzadas de personas en la última dictadura cívico militar en Argentina.

«Todo empezó en 2017 a raíz del intento de la Corte Suprema de fallar a favor del 2×1. Estuvimos en la marcha, en ese momento todavía no nos conocíamos, fue lo que surgió porque se veía venir que podían volver a dejar en libertad a los genocidas y que se podía repetir la historia, porque sabemos lo que fue el gobierno de Mauricio Macri. A raíz de esto salimos a la calle», explica Lorna. «Por una nota, en los comentarios nos fuimos encontrando, juntando, y se armó el colectivo. La característica que tiene esto es que tratamos de organizarnos en un colectivo de acción política, no partidaria, para expresar que somos muchos hijos, hijas y familiares que no estamos de acuerdo con lo que pasó, que repudiamos lo que hicieron nuestros padres. No todo es el lado Pando de la vida. Al contrario, lo repudiamos».

Asimismo, reflexiona sobre el periodo y prefiere definirlo como «una dictadura empresaria, eclesiástica y militar» porque «si hablamos de cívico militar, lo cívico involucra a toda la sociedad y, al hacerlo, las responsabilidades se diluyen». «En 2018 salió una investigación de CONICET y la Secretaría de Derechos Humanos donde se detalla el accionar de muchas empresas muy importantes durante la dictadura, desde dar información a prestar parte de sus plantas para que se creen dentro de ellas centros clandestinos de detención», detalla la autora y activista. «Lo más grave es que al seguir y morir impunes, tenemos los problemas que tenemos con todas las grandes empresas que boicotean a un gobierno nacional y popular».

«En lugar de tener el recuerdo de mi padre de alguien que fue una persona valiosa para la sociedad, tengo el recuerdo de un genocida» y «esas cosas que parecen tan lejanas, no lo son, afectan la vida de las personas», reflexiona Lorna Milena sobre su historia personal. «Hay toda una estructura que sostuvo la dictadura», la misma que realizó «vuelos que arrojan gente al mar» o centros clandestinos de detención, con «distintos niveles de responsabilidad que sostengan todo eso, por eso es importante que cada uno se replantee, no por revancha sino para tomar conciencia».

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