Luego de tres años de espera, la 5° temporada de «Stranger Things» llegó a Netflix y, no solo reavivó al fandom de la serie, también trajo consigo un nuevo debate en las redes. A medida que los primeros episodios llegaron a la pantalla, fanáticos comenzaron a señalar similitudes entre la serie de los hermanos Duffer y otras franquicias como lo es «Harry Potter».
A los hermanos The Duffer Brothers, creadores y guionistas de «Stranger Things», les preguntaron en múltiples entrevistas a lo largo de los años acerca de estas comparaciones. Si bien sostienen que su historia mantiene su originalidad, reconocen que incluyeron en la serie homenajes a películas, libros y series que marcaron a ambos en su infancia.
En las redes sociales y el fandom, una de las discusiones más fuertes tiene que ver con el rol clave que toma Will en esta última temporada y la manera en que su historia termina pareciéndose muchísimo a la de Harry Potter. Los dos personajes viven con una conexión forzada con el villano que los acecha desde temprana edad, en el caso de Will con Vecna y en el de Harry Potter con Voldemort. Esa marca los condiciona constantemente, los sigue a donde vayan y termina definiendo todo lo que les toca vivir.
Además, Will tanto como Harry llevan adentro una parte de la oscuridad a la que están intentando derrotar. Ese vínculo se nota en los dolores físicos que sienten, en las visiones que los atormentan y en la habilidad que tienen para percibir lo que el villano principal piensa o planea. Los dos personajes están atravesados por la lucha interna que los afecta en todos los ámbitos de sus vidas, y no les deja experimentar una adolescencia normal.
Pero las similitudes entre Will y Harry Potter no terminan en su conexión con el villano. Los dos se convierten en «héroes» por ser los elegidos del mundo, a su mediana edad no pidieron involucrarse dentro de los conflictos que exceden su voluntad, pero la situación los ubicó allí desde chicos. Dentro de ellos habita una parte del enemigo que los envuelve, una amenaza constante para ellos mismos y sus seres queridos. Su valentía nace del dolor y del miedo de haber atravesado experiencias traumáticas que los obligaron a madurar antes de tiempo.
A pesar de su importante participación, ninguno actúa solo, cuentan con el sostén emocional de sus amigos incondicionales, que se transforman en una especie de armadura para enfrentar la oscuridad. Will tanto como Harry son personajes profundamente sensibles, que se permiten quebrarse, dudar y sentir culpa. Esa fragilidad forma parte de su humanidad y contrasta con el poder que llevan en su interior.
El camino de los dos personajes los encamina hacia su sacrificio. Y aunque en la historia de «Harry Potter» ya conocemos cómo se resuelve el conflicto, «Stranger Things» recién entra en su tramo final este 31 de diciembre. Habrá que esperar para descubrir si Will enfrentará un desenlace similar o si la historia guarda un cambio de trama inesperado que cambie todo.
Por otro lado, Vecna, el enemigo de Eleven en «Stranger Things», comienza su historia como Henry Creel, un niño con habilidades especiales que terminó formando parte de los experimentos del laboratorio de Hawkins como el primer sujeto «001». Su llegada al Upside Down marcó un antes y un después. En ese lugar, su cuerpo se deformó y su mente se quebró hasta convertirse en un monstruo aterrorizador. Según contó su actor, Jamie Campbell Bower, «detrás de ese monstruo todavía habita el dolor de un chico que alguna vez solo quiso sentirse querido».
Un recorrido muy parecido es el que atraviesa Tom Riddle en Harry Potter. Él también sufre de una infancia dura, cargada de abandono, resentimiento y un miedo constante a la muerte. Esa fragilidad termina empujándolo a convertirse en Voldemort, un villano que reprime su humanidad para aferrarse al poder absoluto. Vecna y Voldemort comparten ese camino hacia la oscuridad, naciendo como personas comunes, pero transformándose en villanos capaces de cualquier cosa. Ninguno de los dos se conforma con atacar a nivel físico sino que se alimentan del sufrimiento emocional de sus víctimas. Usan los recuerdos traumáticos, la culpa y el miedo como herramientas para debilitar y dominar.
Y hay un detalle visual que los fans no dejan pasar. Vecna tanto como Voldemort lucen prácticamente sin nariz y con su cara totalmente desfigurada, su físico se convierte, así, en la prueba viviente de la humanidad que dejaron atrás.
Las similitudes entre «Stranger Things» y «Harry Potter» no son casualidad. Más allá de si se trata de una referencia directa o de coincidencias propias del género fantástico, esas conexiones siguen alimentando teorías, comparaciones y una emoción colectiva que no disminuye.
Ahora, con la serie llegando a su fin, la incógnita se vuelve inevitable: ¿Will y Harry tendrán el mismo final o los hermanos Duffer demostrarán que todavía hay más por explorar? El 31 de diciembre resolveremos la duda, con el capitulo final de «Stranger Things».