Para presentar a Salta La Banca no hace falta decir que es una de las bandas de la escena nacional con mayor proyección de los últimos años. Todo comenzó como un dúo: corría el año 2007 en Villa Raffo cuando Santiago Aysine (voz) y Alberto Grammatico (guitarra y coros) se unieron para emprender un proyecto acústico. En 2009 nació «Salta La Banca», cuya formación fue completada por Santiago Maggi (teclado y acordeón), Gonzalo Sosa (bajo), Julián Baranchuk (batería), Mauro Ostinelli (saxo) y Ramiro Maidana (armónica).
A base de esfuerzo y autogestión la agrupación ya cuenta con cinco discos en su haber: «Ya no somos dos ahora» (2009), «Seremos» (2011), «C.O.P.L.A.» (2012), «Visceral» (2013) y «Eureka» (2015), con los que recorrieron el país entero para llevar su música y sus ideas como estandarte. Y digo sus ideas porque no pasarán desapercibidos al subirse a cualquier escenario. Fieles a su estilo contestatario, no se callan nada, expresan sus críticas al sistema y se hacen eco de las causas que les parecen justas. Tal vez por eso se autodefinan como «suerte de crispadores para muchos, suerte de argumento para muchos más». Prueba de ello fue la composición de su disco «C.O.P.L.A.» (Canto Obligado Por Luciano Arruga) donde exhibieron su protesta por la desaparición del joven secuestrado por la Policía Bonaerense en enero de 2009.
El crecimiento vertiginoso de la banda los llevó en octubre de 2014 a concretar su primer Luna Park y el 16 de octubre pasado cumplieron nuevamente el sueño de pisar por segunda vez ese escenario, luego de su primera gira patagónica.
Hablamos con Alberto «Beto» Grammatico, guitarrista y uno de sus fundadores, sobre la historia y el gran presente que vive de Salta La Banca.
Imagino que ofertas de discográficas no les han faltado, ¿por qué eligieron y siguen eligiendo hoy ser una banda independiente?
«Claro, hemos y seguimos recibiendo. Sabemos que es muy tentador porque la realidad es que es algo que levanta mucho cualquier producto, pero nuestra convicción está intacta y este sueño es así. Independiente y autogestivo. Estamos muy contentos con esa forma de encararlo.»
¿Qué obstáculos encontraron en el camino de la independencia para desarrollarse como banda?
«Al principio es difícil que te den bola si nadie sabe quién sos y no venís con la espalda de alguien que te haga el puente para entrar. Las radios grandes, salvo programas que tengan una temática más under, no se hacen eco de esas cosas. Luego, si la rueda empieza a girar, pasa aunque no estés casado con nadie. Después el hecho de hacer giras es muy costoso y los riesgos los asume uno mismo. Si la fecha no camina perdés mucha plata, y eso nos pasa aún hoy en algunas plazas, lo cual no hace que queramos dejar de hacerlo o nos quite la emoción que nos da recorrer el país. Grabar discos cada vez mejores, con productores cada vez más grosos, en mejores estudios y con mejor equipamiento también es todo un tema, ya que uno debe autosolventar ese gasto, que luego no vuelve directamente con la venta del mismo. Todas son cuestiones con las que convivimos día a día, no sé si llamarlos obstáculos, pero sí son elementos a sortear para poder llevar adelante un proyecto así.»
¿Por qué son partidarios de ofrecer sus discos gratis en la web?
«Hay que hacer un cambio en el paradigma de la venta de discos. La realidad es que internet cambió eso de raíz y uno tiene que encontrar cómo reinventarse. El hecho de que uno compre el disco y tenga la posibilidad de subirlo es una realidad latente. Entonces preferimos subirlo nosotros mismos, con nuestras condiciones, cuidando la calidad del audio y promocionándolo nosotros mismos, teniendo un control de cuánta gente lo baja y ciertos parámetros que nos sirven para seguir desarrollando un crecimiento. También consideramos que la música es de todos y que el que no tiene dinero para comprarle la leche a la hija y comprarse el disco tiene que tener la posibilidad de poder adquirir el disco y disfrutarlo al igual que el que económicamente puede.»
¿Cuáles son los próximos proyectos de la banda?
«El norte siempre está en seguir mejorando musicalmente, hacer canciones cada vez mejores y ser mejores instrumentistas día a día. Después un nivel grupal más global, estamos invirtiendo en infraestructura, tratando de que eso se refleje en la calidad del producto. Tener un estudio al menos chiquito en la sala, buen monitoreo para los shows y demás cuestiones técnicas. Los objetivos de tocar en River y todo eso, la realidad no son cosas que hablemos o que estén planteadas, son más un deseo de que algún día ocurra que un proyecto.»
¿Hay algún sueño que tengas pendiente de cumplir con Salta La Banca?
«Nuestro sueño es hacer historia grande en la música. Dejar nuestra huella en una historia tan rica como la del rock de nuestro país. Ese es nuestro sueño más grande.»
Si querés presenciar alguno de sus shows antes de terminar el 2015, comparto las próximas fechas: 27 de noviembre en Fish Puerto Nuevo (Paraná, Entre Ríos) y el 13 de diciembre será el último show del año en el Teatro Vorterix (Ciudad de Buenos Aires).
