A través del Decreto 721, el presidente Mauricio Macri le otorgó a las Fuerzas Armadas la libertad de acción para atribuir ascensos, traslados, designaciones, premios y demás facultades que hasta esta semana recaían en la figura del Ministerio de Defensa y que había sido establecido por Raúl Alfonsín a principios de la década del 80′, solo un par de años después de la finalización de la última dictadura cívico militar en Argentina.
Así, el texto firmado por el mandatario, que modifica el Decreto 436 del año 1984, manifiesta que «resulta necesario establecer procedimientos ágiles que permitan atender las cuestiones relacionadas con la gestión del personal de las Fuerzas Armadas» y es «conveniente adecuar, asimismo, las disposiciones en materia de designación del personal militar y civil para prestar servicios».
De esta forma, cada área pertenecientes a las Fuerzas Armadas tendrá la posibilidad de disponer según su criterio los cambios en el destino de los oficiales y suboficiales, como así también la designación del personal militar retirado para cumplir con la docencia en diversos establecimientos educativos y de formación.
Otras funciones que tendrán los superiores es la de dar de baja, otorgar licencias, realizar retiros obligatorios de jefes y oficiales subalternos, además de los nombramientos y rescisiones.
Como era de esperarse, las críticas no demoraron en llegar y Leopoldo Moreau expresó que «está claro que quieren demoler la Doctrina Democrática que diseño Raúl Alfonsín para con las Fuerzas Armadas y las subordinó al Poder Civil, que permitió estos 33 años de Democracia ininterrumpida». Además, el titular del Movimiento Nacional Alfonsinista y expresidente del Congreso de la Nación, asegura que «el decreto que firma Macri no es una casualidad, está en línea con una Política de Derecha que intenta demoler los resortes de control del Poder Civil para revertirla».
Pese a que el contexto es otro diferente al de principios de la década de los 80′, la decisión gubernamental de quitar de la órbita del Presidente de la Nación lo relacionado a las Fuerzas Armadas muestra a las claras un poder real que durante más de 3 décadas no recayó en este ámbito. Lo concreto es que se facilita una herramienta de acción a un organismo que ya tuvo en diversas oportunidades (y no siempre de la mejor manera) un rol destacado en la historia de nuestro país. Lo que vendrá está por verse.
Macri devuelve poder a las Fuerzas Armadas
