El Gobierno Nacional decidió impulsar modificaciones en el receso del Poder Judicial, la denominada «feria» que abarca todo el mes de enero y 15 días en julio. Al respecto, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, señaló que es necesario «debatir cómo darle agilidad a la Justicia y que la rueda judicial no se deje de mover 45 días al año, con un grave perjuicio para los ciudadanos. Se plantea discutir cómo podemos hacer para que fiscalías y juzgados no permanezcan cerrados al público tantos días».
«También creemos que hay que ampliar los horarios de atención al público con dos turnos de trabajo», añadió el Ministro, quien aclaró que «la Corte Suprema, el Consejo de la Magistratura y el Ministerio Público Fiscal son los organismos que deben expedirse sobre el tema». Por otra parte, aseguró que desde su cartera se dará toda la ayuda y colaboración que requiera «el Poder Judicial para llevar adelante las reformas necesarias para asegurar el acceso a la Justicia durante todo el año».
«Tribunales más cercanos a las demandas»
El coordinador general del Programa Justicia 2020 y exdiputado nacional, Ricardo Gil Lavedra, dijo que «es muy sano que, en el marco de un programa integral de reforma de la Justicia, también se debata este tema», y sostuvo que es «una discusión necesaria». En apoyo de la iniciativa oficial, afirmó que «tener los Tribunales cerrados mucho tiempo dificulta el acceso a la Justicia», y expresó que los cambios podrían derivar en unos «Tribunales más cercanos y sensibles a las demandas de los ciudadanos». Sin embargo, remarcó que la decisión final «pertenece al gobierno de cada poder del Estado y va a depender de las decisiones que se tomen en el Poder Judicial».
Precisamente, Justicia 2020 es un proyecto diseñado por el Gobierno Nacional cuyo objetivo es «incorporar el aspecto social en la administración del derecho e incluye medidas relacionadas con la prevención del delito e inclusión de las minorías», según se informó mediante un comunicado oficial.
Asimismo, el programa se desarrollará durante los próximos tres años y contendrá siete ejes temáticos: institucional, penal, civil, acceso a la Justicia, derechos humanos, gestión y Justicia y comunidad.
«Es difícil trabajar bajo el sol en enero»
El sistema judicial argentino está conformado por unos 1.000 jueces y casi 20.000 empleados. La feria laboral implica una interrupción de casi el 20% anual de las tareas laborables de ese sector.
Durante su gestión porteña, Garavano suprimió la feria judicial para los integrantes del Ministerio Público Fiscal. En consecuencia, los integrantes del Ministerio debían coordinar sus vacaciones a lo largo del año para que siempre hubiera un tercio de los trabajadores en pleno ejercicio de sus funciones. Los funcionarios y empleados judiciales manifestaron opiniones divididas, algunos en contra, mientras que otros consideraron que la feria es una política laboral obsoleta. Otros consideraron que sería factible extender el horario de atención durante los días de feria.
Desde el Colegio Público de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires su presidente, Jorge Rizzo, sostuvo que «eliminar la feria es complicado porque se trata de un derecho adquirido. Para los abogados que caminan los tribunales es difícil trabajar bajo el rayo del sol en enero». Otros trabajadores no tienen posibilidad de elección de trabajar o no bajo el sol de verano. La postura contraria corrió por cuenta de Alejandro Fargosi, exmiembro del Consejo de la Magistratura, quien afirmó que «los que somos abogados sabemos que por estrés laboral ningún miembro del Poder Judicial se muere».
El fiscal General de la Corte, Eduardo Quattropani, remarcó que la feria judicial no debería durar más de una semana y que si bien no se atendería al público, sí se haría trabajo interno. También consideró que las vacaciones tendrían que darse como el resto de la administración pública. «El Poder Judicial y el Legislativo tienen por Constitución ese receso, pero ese privilegio se ha desvirtuado y en algún momento debe cesar. Yo he renunciado, de manera documentada, a más de 80 días de licencia», señaló.
Los gremialistas se mostraron en contra. Al respecto, Sebastián López de la Unión Judicial, sostuvo que «están los derechos de los trabajadores, dado que la jornada laboral está establecida por ley orgánica». «La eliminación no va a tener el efecto deseado. Si hay más trabajo administrativo, habrá más causas en estado de resolver en los despachos de los jueces. Hoy los juzgados están atrasados en el dictado de sentencias», afirmó el sindicalista.
El funcionamiento de la Justicia
La organización Fores (Foro de Estudios Sobre la Administración de Justicia) realizó un estudio en el que señaló que «la feria judicial implica una interrupción del 18,36% anual de la labor del sector» y que «el sistema de Justicia funciona solo 190 días al año».
«Si a ello sumamos que se trabajan seis horas diarias, el resultado es de 132 jornadas», señala el informe. La «Agenda Anotada para la Justicia Argentina 2020», elaborada por Fores, fue una de las bases del proyecto de reforma de Justicia de Cambiemos.