Llamó la atención ver a Independiente, el Rojo de Avellaneda, vestido de amarillo contra Newell’s Old Boys en un partido por el torneo de verano. Esa camiseta fue usada en 1975, en una gira asiática que arrancó en Indonesia, contra el Persija Jakarta, de casaca colorada. Para diferenciarse, el equipo argentino recurrió a último momento a remeras de las tres tiras amarillas y estamparon el escudo.
Al parecer, el color le trajo suerte a Independiente por la gira que siguió en Sumatra y Hong Kong, porque ganó 5 partidos y empató solo 2, entonces decidió usarla en el torneo local y hasta en la final de la Copa Libertadores de 1975 contra la Unión Española, aunque en la ida en Santiago perdió 1-0, en la vuelta ganó en Avellaneda 3-1 y el desempate en Asunción fue victoria 2-0, pero vestidos de rojo. En el modelo de 2014 que se lanzó para conmemorar a aquel equipo, hay una inscripción abajo en letras asiáticas y querría decir «campeón del mundo».
En la final de la Copa Intercontinental de 1984, Independiente tuvo que enfrentar al Liverpool. Ambos tienen camisetas rojas, pero esta vez el equipo inglés tuvo que vestir con el llamativo color, y así le fue, porque perdió 1-0 con el gol de Percudani y así Ricardo Bochini y Daniel Bertoni levantaron la última copa que consagró campeón del mundo al equipo de Avellaneda.
Sorpresivamente, la selección argentina vistió de amarillo
Fue en el Mundial de Suecia 1958, en el partido contra Alemania, porque el blanco de los germanos y el albiceleste de nuestro equipo se confundían, entonces el cuerpo técnico de Guillermo Stábile intentó solucionar el inconveniente y recurrieron a las camisetas del Malmo, dueño del estadio donde se jugaba el encuentro. Lamentablemente hubo que ver a la Selección con ese color y derrotada 3 a 1 por los europeos, a pesar que la Argentina contaba con figuras como Amadeo Carrizo, Ángel Labruna, Omar Orestes Corbatta y José Sanfilippo.
Hoy con la globalización que genera internet nos enteramos los colores de las selecciones y en Brasil 2014 no viviremos una situación como aquella de fines de la década del 50, casi ningún equipo elegiría al amarillo para una camiseta suplente si no es un color que respete a su historia, pero siempre hay sorpresas y, en este caso, la dará Japón, que siempre ha usado el azul o el blanco, pero ni siquiera pensó en el rojo, sino que se decidió por una polémica amarilla.
La moda del amarillo se impuso en Europa y Sudamérica, algunas por cuestiones comerciales y otras para conmemorar a míticos equipos que han logrado títulos, como el caso de Independiente, el «Rey de Copas», o bien para distinguir a un conjunto de otro cuando la televisación era en blanco y negro, dado que el rojo pasaba por oscuro y necesitaban una casaca clara. En los partidos de antaño era usado por los arqueros en sus buzos (o bien el gris), porque el negro ya era usado por el árbitro. Los equipos de Inglaterra, Escocia, España, Alemania, Holanda, Argentina, Brasil, Colombia y Perú se la jugaron por el color de la polémica.
Yellow submarine
Algunos equipos del Reino Unido recurrieron al color en cuestión para usarlo en sus camisetas suplentes sin explicación: Arsenal tradicionalmente ha jugado de rojo, el Tottenham usa el blanco y un mínimo de azul oscuro como colores insignia o Everton que es azul, el Southampton que siempre ha sido rojo y blanco, Aston Villa con un borravino y celeste. El Chelsea, en cambio, siempre utilizó camisetas azul eléctrico, pero con la inclusión del amarillo por primera vez entre 1965 y 1967, se convirtió en un caso especial, al ser uno de los conjuntos que usó en su camino para ganar la Recopa de Europa 1970-71. El Newcastle cuenta con bastones blancos y negros, pero recurrió al amarillo y azul después de ganar la Copa de Ferias (ex Europa League) de 1968, pero el dato más llamativo pasa por su incorporación en 1974 en homenaje a Brasil, que defendía el título de México 1970 en el Mundial de Alemania, y por eso se agrega el verde.
El rojo del Manchester United fue reemplazado por una edición limitada en dos mitades verticales, una verde y otra amarilla, pero su explicación llega a los orígenes del club. Se hizo para conmemorar su primer nombre, el «Newton Heat», que estuvo al borde de la quiebra en 1902 después de 10 años en primera, y su presidente decidió cambiar el nombre a Manchester United. En 1992 se relanzó aquel mismo modelo para conmemorar los 100 años del cambio de nombre. En Escocia, el Celtic (que es verde y blanco) jugó totalmente de amarillo por primera vez en 1970, año que ganó una Premier League escocesa, una Copa de La Liga y una Copa de Glasgow, y siguió con su tercera alternativa para el título de la Premier de 1971.
Giallo y amarillo
Al menos seis clubes de Italia también usaron el amarillo para sus camisetas suplentes, como la Juventus que siempre se ha distinguido por el blanco y negro, el Napoli y La Lazio (ambos con el celeste como color titular). Hasta la Fiorentina, típicamente violeta, y el Udinese, de bastones blancos y negros, y el Inter «neroazzurro», que solo tiene amarillas sus letras.
En España también entró en la polémica, con camisetas suplentes. El Sevilla usó amarillo, pero sus colores son blanco con algún detalle en rojo, el Atlético de Madrid estrenó hace poco una amarilla con hombros negros, pero es de bastones rojos y blancos, y hasta el Deportivo La Coruña de blanco y azul usó el color en cuestión. El Espanyol de Barcelona es azul y blanco, pero en sus comienzos fue amarillo, porque un empresario de la industria textil de Barcelona le había facilitado a uno de los primeros dirigentes una gran cantidad de tela de ese color en el 1900, año de su fundación, aunque después fueron los jugadores quienes iban con sus camisetas y predominaban los colores actuales.
En Portugal tampoco perdieron oportunidad de recurrir al amarillo, como el Porto que siempre ha sido azul y blanco y el Benfica, que tuvo el año pasado una camiseta dorada y el color claro en su primera camiseta. Hasta el Wolfsburg de Alemania llegó a usar una segunda suplente amarilla, cuando siempre ha sido verde con detalles blancos. En Holanda la nota la dieron el Feyenoord y el Ajax, ambos de blanco y rojo, pero con alternativas amarillas.
Y por casa cómo andamos
Sudamérica ha visto a varios de sus equipos con colores que nada tienen que ver con la historia o su escudo, y el amarillo no ha sido una excepción. En Argentina la nota la dio Tigre con una alternativa para el azul y rojo, en Brasil el Cruzeiro que siempre fue azul o blanco o el Palmeiras que siempre ha sido verde o blanco en las suplentes… y el Flamengo, siempre rojo y negro pero con una amarilla flúor en su historial de suplentes.
En Colombia se conmemoraron distintos aniversarios, como Independiente Santa Fe que es rojo y blanco, pero incluyó el amarillo para celebrar los 468 años que cumplió la ciudad de Bogotá en el año 2007, con el himno de la ciudad impreso en el pecho. Millonarios es de tradición azul, pero lo hizo para conmemorar el bicentenario de la independencia de Colombia y honrar la memoria de los rebeldes que lucharon contra las autoridades coloniales españolas y que llevaban escarapelas en sus brazos con los colores amarillos y rojos, al igual que España. La bandera de la capital colombiana lleva esos colores, con el amarillo que refleja la constancia que se ha de tener en los peligros. Después, el Atlético Nacional de Medellín, último campeón y de tradición vede y blanca, usó camiseta amarilla con una V negra en el pecho para diferenciarse del Deportivo Cali (también verde y blanco) en la final de ese país. En Perú la nota la dio Sporting Cristal, que siempre ha sido celeste o azul oscuro, pero que usó el color claro y sin motivos.
Algunas tienen su razón histórica y otras motivos comerciales. Como verás, el color amarillo no ha pasado desapercibido en la historia del fútbol si hablamos de camisetas suplentes.
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