Las ventas en comercios minoristas en febrero cayeron 7,4% en relación al primer mes del año. Además, según el relevamiento que lleva adelante la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la variación interanual deja un saldo de 25,5% menos de compras, es decir, se vende un cuarto menos que durante el mismo periodo mensual en 2023.
«Desde muchos comercios se señaló a febrero como un mes para el olvido, con días consecutivos donde no se registraron ventas. Las familias dejaron visibles todos sus problemas económicos y en los hogares hubo desahorro (los gastos fueron mayores que los ingresos) para llegar a fin de mes. Asimismo, las vacaciones se llevaron el dinero excedente», comunicaron desde la entidad.
«En el análisis por rubro, seis de los siete sectores evaluados tuvieron descensos, en comparación con el mismo periodo del año anterior. La mayor retracción anual se detectó en Perfumerías (-40,9%) y el único incremento estuvo en Textil e Indumentaria (+3,5%). Así surge del Índice de Ventas Minoristas Pymes de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, elaborado en base a un relevamiento mensual entre 1.350 comercios minoristas del país», detalla el organismo. Cabe mencionar que las restantes caídas en las ventas pertenecen a Farmacia (-39%); Alimentos y Bebidas (-33,3%); Ferretería y Materiales para la Construcción (-28,2%); Bazar, Decoración, Textiles de Hogar y Muebles (-22,7%); y Calzado y Marroquinería (-21,4%).
Al respecto del análisis de consumo, CAME explica que «los consumidores buscaron ofertas y productos de segunda y terceras marcas para abaratar el carrito. En los comercios consultados expresaron que, como estrategia para controlar los gastos, se notaron compras con más frecuencia, pero en menores cantidades. El ramo más afectado fue el de las bebidas, con fuertes subas de precios en los últimos meses, donde el consumidor se privó especialmente de gaseosas, jugos y aguas, especialmente en primeras marcas. Otro alimento que tuvo más sustitución de lo habitual fue la carne, aunque cuando aparecían ofertas se agotaban».
En cuanto a los productos de farmacia, «para algunos empresarios consultados, la caída fue inédita, porque hacía tiempo que no se daba en esas dimensiones. No hubo faltantes de productos, pero los comercios repusieron lo necesario y eso también limitó el stock», y «hubo más rechazos de tarjetas de lo habitual por falta de fondos, lo que hizo cancelar compras» en perfumerías.
Para completar el panorama, es importante obtener un análisis del único rubro en el cual el mes de febrero dejó un saldo positivo. Sobre este punto, desde CAME aseguran que «en indumentaria, las tiendas mantuvieron los importes de diciembre y enero para sacarse las prendas de verano de encima y hacerse de liquidez. Además, hubo negocios donde el turista internacional fue el gran salvador, llevándose varias prendas en una sola compra. También los que venden ropa escolar marcaron alguna diferencia frente al resto».
