Tigre le ganó 1 a 0 a Atlético Tucumán y, de esta manera, terminó de liquidar la serie con un global de 6 a 0 y se clasificó a la final de la Copa de la Superliga. Enfrentará al ganador del cruce entre Boca Juniors y Argentinos Juniors.
Todos a la olla
Como era de esperarse, Atlético Tucumán dispuso de un esquema táctico más que ofensivo y dejó solo a Rodrigo Aliendro como único hombre de contención en la mitad de la cancha. Acorde a esta postura, el local salió a buscar el arco rival desde el primer minuto, apremiado por la necesidad de meter al menos cinco goles para empatar la serie.
Por su parte, Tigre mantuvo una postura más pasiva, esperando a que su rival haga el desgaste al que estaba obligado y pudo contener los ataques pocos claros para salir de contra. Y cuando logró hacerlo a través de la conducción de Diego Morales, evidenció los espacios que encontró en campo rival, pudiendo lastimar.
El partido se quebró cuando a las 27 minutos Germán Delfino decidió expulsar a Rodrigo Aliendro, después de que el jugador cometa una infracción merecedora de tarjeta amarilla y luego de que se queje de manera demasiada enfática para «ganarse» dicha expulsión. Si los ánimos se caldearon en el José Fierro en ese momento, no fue nada en comparación cuando 12 minutos después llegó la segunda expulsión en el equipo tucumano, tras una acción infantil por parte de Yonathan Cabral. Este estrelló un pelotazo en la humanidad de un rival a modo de queja por una sanción del nuevamente protagonista del partido: el árbitro Germán Delfino.
Así se fue la primera parte, más que candente y con un panorama muy desolador para los de Ricardo Zielinski, que no solo tenían que remontar un 0-5 sino que debía hacerlo con dos jugadores menos.
Cerrar la serie
A sabiendas de que solo un milagro futbolístico podía llegar a revertir la tan compleja situación, el director técnico local intentó dejar lo mejor parado posible a su equipo. Ingresó Juan Ignacio Mercier por Ricardo Noir para contener el diezmado medio campo y así evitar que el partido termine mostrando mucha diferencia entre ambos equipos.
Pero la diferencia no tardó demasiado en hacerse visible cuando, a los 17 minutos de iniciada la segunda parte, el ingresado Hugo Silveira puso en ventaja a los de Néstor Gorosito, cabeceando libremente para vencer el arco de Cristian Lucchetti.
Todo lo que restaba del espectáculo sobraba y el ambiente se hizo más pesado aún cuando de la tribuna lateral arrojaron una roca de hielo, que pudo lastimar al árbitro asistente. Delfino detuvo el juego, mientras que las autoridades de seguridad evidenciaron la existencia del objeto en cuestión. El lamentable hecho se reiteró unos minutos más tarde y el procedimiento se tuvo que repetir, lo que puso en peligro la continuidad del partido.
Quedó poco fútbol para ver en un duelo que ya estaba definido. Néstor Gorosito metió mano en el banco de suplentes y comenzó a cuidar a sus principales figuras de cara a la final del certamen. Los locales siguieron yendo al área rival con puro corazón, pero no alcanzó para doblegar la valla de Gonzalo Marinelli y así se terminó de cerrar la serie, con un aplastante global de 6 a 0 para El Matador de Victoria, que se clasificó a la final de la Copa de la Superliga.
Formaciones e incidencias
Atlético Tucumán: Cristian Lucchetti; José San Román, Yonathan Cabral, Franco Sbuttoni, Gabriel Risso Patrón; Rodrigo Aliendro; Ricardo Noir, David Barbona, Gervasio Núñez; Javier Toledo, Leandro Díaz. Entrenador: Ricardo Zielinski.
Tigre: Gonzalo Marinelli; Matías Pérez Acuña, Ezequiel Rodríguez, Ignacio Canuto, Nicolás Colazo; Lucas Menossi, Sebastián Prediger, Agustín Cardozo; Diego Morales, Juan Cavallaro; Federico González. Director técnico: Néstor Gorosito.
Gol: 62′ Hugo Silveira (Tigre). Amonestaciones: 18′ Juan Cavallaro (Tigre), 27′ Rodrigo Aliendro (Atlético Tucumán), 35′ Yonathan Cabral (Atlético Tucumán), 40′ José San Román (Atlético Tucumán). Expulsiones: 27′ Rodrigo Aliendro (Atlético Tucumán), 39′ Yonathan Cabral (Atlético Tucumán). Árbitro: Germán Delfino.
