Oasis.decart.ia es una página pionera en los juegos generados utilizando la Inteligencia Artificial (IA) como motor gráfico.
Fue lanzada el 31 de octubre de 2024, pero su desarrollo comenzó mucho antes, en 2022. El objetivo del proyecto es demostrar que es posible crear mundos interactivos complejos completamente generados por IA, lo que podría revolucionar la forma en que interactuamos con los videojuegos en el futuro.
Fue creado en forma colaborativa por las empresas de informática Etchedpor (estadounidense) y Decart (israelí), que diseñaron una IA capaz de predecir el entorno, basado en una memoria continua de los últimos 24 fotogramas. Para entrenar al algoritmo, se lo sometió a millones de horas de material del videojuego “Minecraft”, un sandbox de mundo abierto. Gracias a esto, el software es capaz de recrear la física, la iluminación, el inventario y el uso de objetos de forma similar que el título original. Aunque no quita que ocasionalmente puedan ocurrir cambios espontáneos en el entorno, debido a que no se almacenan los datos de juego, lo que hace que la experiencia sea variada y dinámica.
El programa utiliza un complejo sistema de procesamiento de comandos capaces de interpretar las acciones del jugador, traduciéndose en cambios visuales. Cuando una orden es emitida, sea movimiento, construcción o interacción con objetos, el sistema procesa estas entradas a partir de capas transformadoras, que son redes neuronales entrenadas para comprender la relación existente entre las acciones y sus cambios visuales en el mapa del juego. Además, se espera que con el lanzamiento de Sohu, un chip especializado para inteligencia artificial, lanzado por la propia Etched, Oasis tenga el potencial de escalar a modelos mucho más grandes y complejos, incluso, alcanzando una resolución de 4K. Estos chips de arquitectura especializada, le abren la puerta a los videojuegos de video a la tendencia tecnológica de la IA.
El sistema de capas transformadoras, permite que en la página esté disponible una opción llamada «Mundo Personalizado», donde los usuarios pueden subir una imagen que servirá como el primer fotograma del juego. Luego, la fotografía evoluciona basándose en las acciones del jugador y creando un mundo único y personalizado.
Sin embargo, Oasis no está exento de polémicas. Al igual que muchas tecnologías similares, tiene un importante impacto ambiental debido a la alta demanda de energía que generan los centros de datos al procesar los algoritmos. Esto puede aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero y la fabricación de hardware especializado para IA, lo que produce residuos electrónicos y requieren de la extracción de materiales que pueden no ser renovables.
Se espera que el proyecto Oasis marque el inicio de una nueva era en la implementación de la IA en los videojuegos. Su influencia, podría transformar los motores gráficos, incrementar el dinamismo en los títulos, complejizar la inteligencia y profundidad de los NPC, ofrecer experiencias personalizadas para cada usuario y, al mismo tiempo, reducir los costos asociados al desarrollo.
Artículo elaborado especialmente para puntocero por Benjamín Navoni y Maku Martínez en el marco de las Actividades de Aproximación (ACAP) al mundo del trabajo, de los estudios superiores y la formación de ciudadanía.
