Se rompe una maldición
«Es una antigua tradición escandinava: me nominan para el premio y se lo dan a otro. Ya todo eso es una especie de rito. Todos los años me proponen, todos los años me olvidan, eso da prueba de cierta simetría», bromeaba Jorge Luis Borges. «Siempre recibiré el premio el año que viene», reflexionaba irónico el…