Archivos desclasificados

A pocos días de la visita del presidente estadounidense Barack Obama a nuestro país, Washington anunció que desclasificará los archivos de inteligencia relacionados con la última dictadura militar en Argentina. Paralelamente, el Vaticano anunció que tomará una medida similar.
En el caso de Estados Unidos el anuncio corrió por cuenta de la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Susan Rice, quien señaló que a pedido del gobierno argentino el presidente Barack Obama anunciará durante su estadía en Argentina «un esfuerzo abarcativo para desclasificar documentos adicionales» sobre el Proceso.
La funcionaria añadió que la desclasificación de material secreto incluirá «por primera vez archivos militares y de inteligencia» y remarcó que esta iniciativa impulsada por el mandatario norteamericano se suma a «los más de 4 mil documentos que Estados Unidos ya publicó sobre ese período negro» de la historia argentina. «Este esfuerzo está diseñado para afirmar el compromiso de Estados Unidos con los derechos humanos y la transparencia gubernamental», indicaron otros funcionarios estadounidenses.
El anuncio tuvo lugar en un evento organizado por el think tank Atlantic Council para conversar sobre el enfoque de la administración demócrata en la región, donde Rice confirmó que Obama, «para subrayar nuestro compromiso compartido a los derechos humanos», estará en «el Parque de la Memoria para honrar a las víctimas de la guerra sucia de Argentina».
«En este aniversario (de la dictadura) y más allá, estamos decididos a hacer nuestra parte mientras Argentina continúa sanando y avanzando como una nación unida», sostuvo Rice, quien expresó que en el gobierno estadounidense «hemos estado impresionados por muchas de las reformas que el presidente Mauricio Macri ha iniciado y creemos que Argentina puede ser un socio global fuerte en varios temas», como lucha contra el narcotráfico y el cambio climático. Al respecto, indicó que Macri y Obama anunciarán en Buenos Aires «un número de asociaciones» entre los dos países.
La desclasificación de más documentos era un pedido de varios organismos humanitarios argentinos, entre ellos Abuelas de Plaza de Mayo.
La organización cuestionó la fecha elegida por el mandatario para viajar a Argentina, el 23 y 24 de marzo, por coincidir con el 40° aniversario del Golpe de Estado. En el pedido, dirigido al embajador Noah Mamet, Abuelas señaló: «Como defensores y defensoras de los derechos humanos, nos dirigimos a Ud. para solicitar la cooperación del gobierno de los Estados Unidos de América con el proceso de Memoria, Verdad y Justicia sobre los crímenes de lesa humanidad cometidos en nuestro país durante la última dictadura cívico-militar». Además, indicó que la desclasificación del material secreto puede ayudar a «conocer el destino y la verdad sobre lo ocurrido a nuestros desaparecidos; y la realización de medidas destinadas a localizar a los hombres y mujeres que posiblemente sean algunos de los nietos que las Abuelas de Plaza de Mayo vienen buscando».
La dictadura militar iniciada el 24 de marzo de 1976 dejó un saldo de unos 10.000 disidentes asesinados según los números oficiales, mientras que los organismos de derechos humanos denuncian más del doble. Además, se cuestiona la colaboración o inclusive participación de Estados Unidos en el derrocamiento de Isabel Perón.

La reacción del gobierno argentino

Al conocerse la intención del gobierno estadounidense, el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, expresó que es «un paso adelante en nuestro objetivo de cumplir con el postulado de memoria, verdad y justicia».
«Es una demostración de que mediante el diálogo estamos construyendo un nuevo vínculo con los países del mundo. Agradecemos el espíritu de cooperación del gobierno de los Estados Unidos», señaló el funcionario, y tras subrayar que Ejecutivo se hizo eco de las inquietudes de los organismos defensores de los Derechos Humanos, afirmó que «es un logro de todos».
Por su parte el jefe de Gabinete, Marcos Peña, calificó la decisión como «un gran gesto». Al respecto, sostuvo que la misma «demuestra otro hecho concreto de la vocación de los Estados Unidos y Argentina de trabajar juntos» sobre los «valores comunes en democracia y derechos humanos». Peña también se refirió al hecho de que Rice no confirmara el hecho y sostuvo que «la prudencia tiene que ver con la complejidad legal, pero hay una vocación clara ante el pedido del gobierno, tomando un reclamo histórico de los organismos de derechos humanos. Hay voluntad del gobierno y creemos que en sí mismo es un hecho muy trascendente».

Francisco también desclasifica

Luego del anuncio norteamericano, el secretario general de la Conferencia Episcopal Argentina, Carlos Malfa, señaló que en la Santa Sede se «están ordenando» papeles que contienen información sobre la década del ’70 para poder divulgarlos públicamente. La información de estos archivos está relacionada con la última dictadura militar argentina.
Malfa expresó que «el ordenamiento de los archivos lleva su tiempo porque implica la lectura y clasificación de documentos. Algunos estaban más ordenados y otros necesitan más atención. En general se trata de cartas que se recibían y contestaban solicitando conocer el paradero de detenidos desaparecidos o alguna gestión en ese sentido. También hay recortes de periódicos de la época».
El secretario precisó que en 2012 la Iglesia argentina se comprometió a ayudar con los procesos de investigación sobre esa época, tras la aprobación del documento «La fe en Jesucristo nos mueve a la verdad, la justicia y la paz». En este documento se menciona, entre otras definiciones, que «cuando la Justicia es demasiado largamente esperada, deja de ser Justicia, y agrega dolor y escepticismo».
El miércoles 23, un día antes del 40° aniversario del Golpe, el papa Francisco se reunirá con familiares de desaparecidos. Específicamente el encuentro será con Marie-Noelle Erize Tisseau, hermana de Marie-Anne, desaparecida en 1976; con Víctor Carvajal, hermano de Alberto, asesinado en 1977; y con Genevieve Jeanningros, sobrina de la monja francesa Leonie Duquet, desaparecida también en 1976.