El loco mundo del espectáculo

La bancamos a muerte

Más allá de si viste o no los MTV Video Music Awards de hace unos días atrás, seguro que algo escuchaste. Miley, que se cree muy graciosa, hizo papelones por hacerse la cool. Personalmente, extraño a Hanna Montana. Me cansé de verle los pezones y de saber que le gusta el faso y masturbarse. Me pudre. Pero parece que yo no soy la única que piensa así.

La cantante Pink hizo su descargo vía Instagram sobre la premiación. Dijo que se sentía vieja (tiene 35 años, en Hollywood los años corren como los de los perros) y que el evento ya no es lo que era. Que MTV ya no es lo que supo ser. Todos coincidimos con eso. Si me preguntan a mí, amo los reality shows pedorros así que MTV me parece simpático. Pero es verdad que ha cambiado mucho en los ultimos años… y no para mejor. Me convencen con VH1, no necesito que MTV haga lo mismo. Pink no se quedó callada y dijo que la música, teóricamente, sirve para inspirar, para salvar vidas.

La cantante confiesa que la música salvó su vida y que lo que se escuchó en lo MTV VMA’s no coopera con la causa. El mundo se está convirtiendo en algo horrible y ahora ni siquiera uno puede sentirse feliz cuando escucha música, simplemente porque lo que escucha apesta.

Dijo sentirse muy defraudada por la industria musical. Sacó de la lista de desastres a Macklemore, The Weeknd, Tori Kelly y hasta al nabo de Justin (pre llanto).

Honestamente, no sé si hubiese dejado a los mismos artistas, pero por lo menos Pink tiene los ovarios suficientes para decir lo que siente.

Obviamente, todo el resto de los artistas que se presentaron en los MTC VMA’s no quedaron muy contentos sobre estos comentarios. Demi Lovato, Nicky Minaj, Taylor Swift, Miley Cyrus, Iggy Azalea y algunas más, sin duda apestan.

Lacras canadienses

Si en algún momento tuviesen que haber hecho un trío, yo me los imaginaba haciéndolo con Justin Bieber, simplemente para no tener que cambiar el titulo de la nota. Porque son eso, lacras.

Ok, quizás estoy siendo un poco agresiva para dos personas que simplemente hacen música horrible. Si no tenías 14 años en el 2002, no puedo entender a quién le puede gustar Avril Lavigne. Sí es más o menos linda y tenía algo de onda.

Pero allá por el 2002, cuando esta movida del new metal pseudo emo pedorro se ponía de moda… ¿había algo peor que tener una onda o pertenecer a una tribu urbana después de tus 20? Posta, es patético. Y esta ya tiene 30 años y se sigue vistiendo como si fuese una princesa punk de verdad. Dudo que sepa lo que el punk significa. La mina nunca evolucionó, ni su onda, sus canciones, su delineador ni tampoco su gusto amoroso. Please, la mina salió con Fred Durst, el bajista de Simple Plan y estuvo casada con el cantante de SUM41. Todas bandas de mierda. Ok, en la mitad tuvo un romance con Brody Jenner, así que por un breve periodo perteneció al clan Kardashian. Por ende, no fue extraño cuando Avril anunció, hace dos años, que se casaba con Chad Kroeger, cantante y guitarrista de una de las bandas más odiada de todos los tiempos: Nickelback.

Hoy en día, y solo porque este es «el año para los divorcios», Avril y Chad hicieron público el suyo. Obvio que al principio todo parecía color de rosas, se separaban en buenos términos, van a seguir siendo amigos y esa cantidad de boludeces que los famosos dicen cuando se separan. Parece que a él se lo vio a los besos en un «cheboli» de Miami con otra y ella no se lo bancó más. Pero la verdad es que Avril la está pasando bastante mal, ya que desde principio de año viene luchando con una enfermedad autoinmune llamada Lyme. Por lo tanto, no está trabajando mucho. El otro día se presentó en el recital de Taylor Swift, pero no se la ve mucho. Así que digamos que su divorcio es la frutilla del postre de un año bastante choto.