¿El último discurso?

En lo que podría ser su última apertura de Sesiones Ordinarias de no mediar una reelección, el presidente Mauricio Macri dio un encendido discurso durante el que se cruzó con dirigentes y legisladores opositores.

Si bien reconoció las dificultades económicas, atribuidas a factores externos, reafirmó el rumbo y las políticas del gobierno y pidió a los argentinos «que no aflojen este año».

«Soy el primero en saber cómo han sido estos meses, cuánto dolor y cuánta angustia, y me he hecho cargo de eso, pero que sea difícil y que lleve tiempo quiere decir que esta vez es verdad», dijo el Presidente, y afirmó que «los argentinos maduramos, tenemos mejor calidad democrática y una mejor infraestructura, y una mejor relación con el mundo». Como ejemplo de esto último, sostuvo que Argentina «construyó confianza y un nivel de respaldo internacional inédito» que quedó evidenciado en la cumbre del G-20 de Buenos Aires.

Al referirse a la forma de gobernar, el Presidente aseguró que «hoy hay un equipo que gobierna pensando en el largo plazo, que dice la verdad, que pone los problemas sobre la mesa, que transparenta el valor de las cosas y que asume la inflación, la pobreza y la inseguridad». También señaló que «después de mucho trabajo y de un proceso de cambio cultural, estamos entendiendo que la energía vale y que sin energía un país no crece y que es importante cuidarla. Desde 2016, hay 27 proyectos nuevos de energías renovables en marcha, y al día de hoy hay 98 en construcción. En total son 126 proyectos en 19 provincias. Este es un verdadero programa de desarrollo federal».

El grupo humano

«Estoy realmente convencido que lograr un equilibrio fiscal sin parches en los presupuestos del 2020 y 2021 será el hecho, el acto de justicia social más importante que hayamos hecho en 70 años, porque el déficit fiscal es el causal principal de la inflación, y la inflación es el causante de la pobreza y el estancamiento de este país», indicó el Jefe de Estado y, en lo que es un slogan registrado de Cambiemos, apeló al grupo humano al señalar que «juntos estamos construyendo los cimientos más profundos. Con obras que empiezan y terminan, que valen lo que cuestan; con rutas y autopistas más seguras; con trenes, puertos y aeropuertos que conectan al país; con conectividad en hogares, escuelas y municipios donde antes no llegaba Internet; con debates que nunca habíamos dado como sociedad y que muestran que los argentinos maduramos».

Por otra parte, Macri apuntó al cambio de mentalidad en la sociedad y en la administración que está encarando desde el Gobierno Nacional. «Estamos haciendo crujir estructuras viejas y oxidadas. Estructuras muy arraigadas que seguían beneficiando a los de siempre. Y todos los días batallamos para cambiarlas con honestidad y determinación. Ya no aceptamos que nos mientan, que nos oculten datos relevantes o que pongan en jaque la institucionalidad de nuestra democracia. Ya no creemos en las soluciones mágicas porque sabemos que las transformaciones profundas llevan tiempo». «Hoy quiero convocarlos otra vez a lograr acuerdos que necesitamos para proyectar nuestra Argentina a 30 años, acuerdos en serio, sin oportunismos ni ventajas, donde todos cedamos algo pensando en el conjunto, especialmente los que tienen privilegios. Solo así vamos a lograr un país con más libertad, con más igualdad y con más justicia para todos». Para reafirmar su postura de cambio, afirmó que «si hubiésemos elegido el camino del atajo como tantas veces se hizo en nuestra historia, estaríamos parados en relatos. Y no. Estamos parados sobre bases sólidas, sólidas».

Respecto a las obras públicas, aseguró que «las estamos haciendo con licitaciones públicas transparentes y a un costo promedio 40 por ciento más barato que en 2015, y este ahorro nos permite hacer más obras para la gente». En el aspecto económico, Macri defendió el «camino gradual que llevamos adelante. Si no hubiésemos tomado las medidas que tomamos la economía hubiera colapsado. Elegimos un camino de gradualismo que funcionó dos años y medio, donde aumentaron las exportaciones, creamos 700 mil puestos de trabajo y bajó la pobreza».

Transformación del Estado

«Detrás de algo que parece simple, como lo es tener la licencia de conducir en el celular, hay una profunda transformación del Estado. Antes 1 de cada 10 municipios tenía herramientas digitales, hoy el 90 por ciento las tiene. Decidimos hacer las cosas más fáciles para los que deseen exportar. 660 pymes ya hicieron más 3.700 operaciones de exportación a casi 100 países», precisó.

Esos beneficios fueron posibles, remarcó el Presidente, «porque trabajamos con mesas sectoriales. Hoy tenemos 55 mesas, donde participan 228 cámaras empresariales y 142 sindicatos, todos sentados alrededor de una mesa, viendo qué potencialidad podemos desarrollar. Y esto es parte del cambio cultural, entender que el mundo es una oportunidad para exportar nuestro trabajo. Las exportaciones crecieron 15% el último año sin contar los productos afectados por la sequía. Y juntos nos comprometimos con Argentina Exporta a exportar 200.000 millones de dólares en 2030».

Según el Jefe de Estado, este crecimiento es posible «porque nos estamos integrando al mundo de forma pragmática e inteligente». «En 2015 los ejes de la política exterior de nuestro país eran la alianza con Venezuela y el pacto con Irán. ¿Cómo puede ser que hayamos condecorado a Maduro cuando hace rato que no respetaba la democracia ni los derechos humanos, ni las libertades? ¿Cómo puede ser?», se preguntó.

«Deben saber la verdad»

Con una frase casi de cabecera, «se cambia en serio», se abocó a hablar de reformas profundas para terminar con la pobreza. «El único camino genuino para salir de la pobreza es el trabajo que se basa en la calidad de la educación. Insistiré este año con un proyecto de ley que cambie un artículo de la Ley Nacional de Educación. Los padres deben saber la verdad», sostuvo el Presidente, y realizó el único anuncio fuerte del discurso: «Los chicos son los más golpeados por la pobreza. Como respuesta y usando la cláusula del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que nos permite reforzar el apoyo del Estado cuando es necesario, hemos decidido aumentar a partir de este mes un 46% la Asignación Universal por Hijo, que hoy tiene 4 millones de beneficiarios».

Respecto a la corrupción, Macri dijo que «el Decreto de Necesidad y Urgencia de Extinción de Dominio es un reflejo de la postura clara que los argentinos tomamos: queremos recuperar los bienes de las mafias, el narcotráfico y la corrupción. Y que cada quien que se oponga diga dónde está parado y a quién quiere proteger porque se acabó, se acabó el tiempo en que los delincuentes se salgan con la suya mientras la enorme mayoría trabajamos para sacar a este país adelante». Como cierre del tema aseguró: «Si la Justicia lo pide, todos tenemos que rendir cuentas. ¡Inclusive la familia del presidente y el presidente!».