La estrella de cine, a través de sus redes sociales, dio a conocer que padece un carcinoma de piel y nos hacemos eco para tomar conciencia de la gravedad de esta enfermedad.
En la última semana se conoció que el actor australiano de 45 años padece una variante leve de cáncer de piel: se trata de carcinoma de células basales en la nariz y, por este motivo, dejó un mensaje para sus seguidores: «Por favor, no sean tontos como yo, háganse ver y usen protector solar», expresó.
Esta enfermedad consiste en un tumor cutáneo de paulatino crecimiento que provoca, entre otros síntomas, el cambio de la estructura normal de la piel y puede ocasionar un bulto en el sitio afectado, aunque este es mayormente indoloro. Esta forma de carcinoma es muy común en la población blanca y llega a representar al 75% de todos los cánceres de piel que surge, y aumenta año tras año por la gran exposición a la radiación ultravioleta sin protección solar.
Este tipo de afección, al ser detectado a tiempo como en el caso de Hugh Jackman que, tras la insistencia de su mujer fue al médico, tiene una alta probabilidad de curación. Sin embargo, al descuidar el control o ignorar el padecimiento puede causar discapacidades o incluso podría ser mortal, aunque casi es nula la posibilidad de que se disemine por otras partes del organismo a pesar de que puede crecer o invadir tejidos cercanos, inclusive nervios, huesos y cerebro.
La incidencia ha aumentado en los últimos años debido, en gran parte, a una exposición mayor a la radiación ultravioleta del Sol. Este tipo de carcinoma ocurre en zonas expuestas a este o su radiación y, en la mayoría de los casos, surge luego de los 40 años. Sin embargo, no es necesario que sea por exposición a rayos UV o X, sino que se debe a la predisposición genética.
Ahora que se acerca el verano y las vacaciones es mayor la posibilidad de estar expuesto a factores que pueden provocar a largo plazo este tipo de enfermedades. Por eso te damos algunos de los ítems a tener en cuenta a la hora de estar expuesto al sol:
Protegé la piel del rostro y cuero cabelludo con sombreros.
No olvides nunca el protector solar, preferiblemente con factor solar mínimo de 15 y que bloquee tanto luz UVA como UVB.
El bloqueador solar debés aplicarlo repetidamente a lo largo del día, incluso si está «nublado».
Evitá la exposición al Sol durante el mediodía, ya que la luz ultravioleta a esa hora es más intensa.
Y, como dice Hugh Jackman: “háganse ver”. Es mejor prevenir que curar.
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