Ivo Cassini, el nadador que participará por primera vez de los Juegos Panamericanos de Lima 2019, habló en Punto Aparte y nos contó cómo está viviendo esta nueva oportunidad de representar al país. El marplatense entrena por la mañana en el gimnasio y por la tarde en la pileta preparándose para la revancha de su carrera.
«La expectativa es muy alta, desde lo personal. En mí hay un pequeño sabor a revancha porque en el 2015 me quedé en la puerta de los Panamericanos en la prueba de 200 metros libres, y ahora tuve la posibilidad de clasificar en aguas abiertas y en pileta. Me pude sacar la espina que me había quedado, fueron 4 años de entrenamiento corridos con la mente puesta en ese objetivo.»
¿Cómo te afectó en lo psicológico?
«En el 2015 fue un golpe bastante duro, porque uno se ilusiona mucho con un juego panamericano y con representar a la selección. Cuando me dijeron que no estaba en el equipo fueron días bastantes duros. Después eso pasó a segundo plano porque tuve un accidente, una fractura en el radio, y pasé por muchos altibajos desde aquel entonces hasta hoy día. Recibí ayuda con una psicóloga deportiva de Mar del Plata y trabajamos sobre procesar todos los pensamientos negativos para potenciar los entrenamientos. Mi familia siempre me apoyó mucho, me enseñaron que la vida siempre da revancha, hay que trabajar duro y no rendirse. Rendirse no tiene premio, hay que seguir intentando sin importar las dificultades que se vayan superponiendo.»
Debido a esta fractura de radio tuvo mucho tiempo libre, y hasta pensó en reconvertirse y darle algo renovado a la natación, por lo que decidió incursionar en aguas abiertas para aprovechar sus ventajas en resistencia. Así debutó en el 2017 en la Copa Del Mundo de Patagones-Viedma (Argentina) donde obtuvo el puesto número 13 y, desde entonces, siguió participando en 10 kilómetros hasta la actualidad.
Sin embargo, declaró que hubo un cambio para la categoría de aguas abiertas.
«Ahora nos llegó la confirmación de que los 10 kilómetros se van a estar nadando en Bujama, una laguna a 200 kilómetros del mar, así que no vamos a estar participando en el mar.»
Si Ivo consigue una medalla en aguas abiertas tiene probabilidades de clasificar a Tokio 2020, ya que lo posicionaría entre los mejores 15 del mundo. Pero en el caso de pileta se clasificaría al hacer la marca mínima sin importar si obtiene alguna medalla en Lima.
Cassini posee un apodo muy curioso que la mayoría desconoce. Su entrenador lo llamó «Pachorra» porque durante dos años consecutivos llegaba a los entrenamientos de la mañana sobre el horario o 5 minutos tarde, pero él asegura que ya corrigió ese comportamiento.
El marplatense reveló que pertenece a una tercera generación de guardavidas. El primero fue su abuelo materno, luego su padre y ahora él y su hermana Eliana, quienes decidieron ejercer la profesión. Esto, además de vivir cerca del mar, le generó ese amor por aquellas aguas en las que incursionó con sus primos desde los 3 años y junto a ellos aprendió a surfear. Ivo elige el surf como otro deporte alternativo o hobbie, además de la natación, ya que los demás podrían ser riesgosos físicamente y debe cuidarse para competir.
Asimismo, expuso que su máximo referente es Michael Phelps, a quien lo denomina como el mejor nadador de todos los tiempos. A este le siguen los australianos Ian Thorpe y Grant Hackett y, por último, mencionó al argentino Damián Blaum, quien lo motivó al verlo entrenar con mucho esfuerzo en el CENARD.
A pesar de esto, la natación no fue su único deporte profesional. «Después de los 17 años en los que participé de mi último Sudamericano Juvenil del cual ya me estaba preparando casi sin entrenador, me retiré de la natación competitiva hasta los 21 años. Ahí practiqué pentatlón moderno, que es nadar, correr, tiro, esgrima y equitación. Me fue muy bien, lo hice a nivel nacional y sudamericano».
Este joven deportista, además, es estudiante del Profesorado de Educación Física, está en tercer año y la cursa de forma tranquila rindiendo de a pocas materias, ya que se dedica de lleno a entrenar.
Por último, dejó un consejo para aquellos que quisieran ser nadadores profesionales. «La natación es un deporte que requiere mucha paciencia porque el progreso es muy lento y es un deporte en el que hay que estar metido por la sensibilidad del agua y sentirse cómodo en el agua. Hay que practicar, pasar mucho tiempo y tener mucha paciencia. La natación es un deporte muchas veces un poco frustrante, pero con paciencia se progresa muchísimo».
Artículo elaborado especialmente para puntocero por Lorena Barrozo.
