Quien pega primero pega dos veces. El equipo de Ramón Díaz fue superior en el primer tiempo y ganó por nocaut, con Manuel Lanzini como figura, con las asistencias de Teófilo Gutiérrez y la velocidad del escurridizo Juan Carlos Menseguez. En la segunda etapa se cayó, parecía que Boca Juniors iba a reaccionar, pero no fue así y River Plate se llevó el triunfo por 2 a 0 en Córdoba.
Teo desbordó por derecha, tiró un buscapie y los defensores de Boca se preocuparon más por el colombiano que por Lanzini, que entró solo y empujó la pelota en el arco, sin marca y sin la resistencia del arquero Emmanuel Trípodi, a los 6 minutos del primer tiempo, aunque algo muy raro había pasado. Dos jugadores del equipo de Ramón Díaz quisieron reponer al mismo tiempo, uno para atrás y otro para adelante, Carlos Bianchi consideró que las dos pelotas en la cancha podían desordenar a sus dirigidos y Diego Abal decidió expulsar al entrenador por las quejas aireadas. No hubo incidencia alguna, porque los volantes y zagueros de Boca siguieron la acción del lateral en ataque y que terminó en el primer gol de la noche.
Abal sí se equivocó en no cobrar una falta por la patada que recibió Juan Manuel Martínez en la mitad de la cancha por parte de Leonel Vangioni, quien tendría que haber sido amonestado y, en lugar de detener el juego y mostrarle la tarjeta amarilla, pudo recuperar una pelota para que Lanzini termine frente a Trípodi, definir cruzado y que la pelota se vaya por poco. Después fue Teófilo Gutiérrez quien corrió por izquierda para llegar al área, rematar cruzado y forzar la estirada de Trípodi, que desvió una pelota que dio en la base del palo izquierdo.
River era más, pero Boca quería reaccionar con el aporte del juvenil Luciano Acosta, que intentaba encontrar espacios para asistir y rematar al arco, pero no había caso. Lanzini seguía en un gran nivel, remató con comba, la pelota iba a entrar al ángulo, pero Trípodi volvía a salvar a Boca, que sufría los avances por la derecha.
La defensa Xeneize volvió a quedar estática y descuidó al Rayo Menseguez, que se filtró en medio de los centrales, quedó mano a mano con el arquero, paró la pelota con el pie izquierdo y definió con el derecho. La última línea de Boca pedía offside, pero el delantero de River estaba habilitado.
El segundo tiempo tuvo algunas reacciones de Boca, sobre todo al principio, con Luciano Acosta como punto más alto, algunos intentos de Juan Sánchez Miño y dos cabezazos de Juan Forlín, uno que forzó una estirada de Marcelo Barovero y otro sobre el final del partido que rozó el palo derecho. River cedió en la segunda etapa, no era el equipo del primer tiempo, tanto que tuvo su primera chance a los 25 minutos con una pelota que Leonardo Ponzio intentó pasar por arriba de Trípodi quien, además, tuvo que despejar un intento dentro del área de Daniel «Keko» Villalva, que había entrado por Juan Carlos Menseguez, ovacionado por todos los hinchas de River que llegaron al estadio Mario Alberto Kempes.
River jugó mejor en el primer tiempo, aunque le costó y no mantuvo ese buen nivel en la segunda etapa. “Tenemos que jugar de esta manera, veo que el equipo va creciendo”, dijo Ramón Díaz una vez terminado el partido. El entrenador de los Millonarios respetó a Boca y aseguró que «tiene jugadores de gran jerarquía, como Fernando Gago o Pablo Ledesma, que por momentos nos complicaron». Por otra parte, Carlos Bianchi consideró que los goles de River llegaron por errores defensivos: «Fueron dos fallas nuestras más que virtudes del adversario» y que levantaron en la segunda etapa después de exigir un par de veces a Marcelo Barovero. Sobre su expulsión, el Virrey explicó: «Estuve bien expulsado. Me extralimité en una expresión. Es mi culpa».
River sacó conclusiones positivas, aunque debe trabajar para mantener un buen nivel durante 90 minutos y no solo 45. Boca no jugó bien en todo el partido. La revancha para el equipo Xeneize será el 1° de febrero en Mendoza y podría contar con la vuelta de Juan Román Riquelme, aunque los problemas no están en la zona del ataque, sino en la línea de defensores».
Récord mundial y apoyo para Falcao
Más de 40 mil personas agitaron sus banderas, cantaron durante 5 minutos y lograron una marca que entró al libro Guinness. Además, los jugadores de River salieron a la cancha con una bandera en apoyo al colombiano, exjugador del equipo de Núñez y figura del Mónaco que sufrió una lesión que lo dejaría afuera del Mundial. Por lo pronto, el colombiano fue operado exitosamente por un equipo de especialistas en Portugal.
El gol de Lanzini
La polémica del primer gol
El gol de Menseguez
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