Superfinal de futsal

Boca Juniors empezó el año de la mejor manera posible: se consagró campeón de la Supercopa 2022, el primer título del calendario futsalero. Los dirigidos por Hernán Garcias vencieron 3-2 a San Lorenzo de Almagro con goles de Nicolás Leguizamón, Franco Martínez Rivera y Franco Spellanzon, mientras que los tantos del «Cuervo» los hicieron Julio López y Felipe Echevarría.

El del domingo fue un encuentro cambiante de protagonistas y friccionado por momentos, donde hubo expulsiones y todo se definió en los últimos minutos. Boca pasó de estar abajo en el marcador a igualar y conseguir la vitoria en su casa.

El recinto deportivo de Hurlingham estuvo repleto, más del 70% eran «Xeneizes» que, con bombos y platillos, armaron su fiesta y buscaban festejar el título, una situación pendiente para Boca, ya que el año pasado logró estar presente en tres finales pero no ganó ninguna.

En cuanto al juego, López abrió el marcador para los dirigidos por Luciano Antonelli, que llegaron al gol a los dos minutos y medio gracias a la presión alta que generaron: el 7 de San Lorenzo inició la jugada desde el lateral, donde le cedió el balón a su compañero y este remató directo al arco, pero Guido Mosenson despejó el balón sin problemas, su rebote quedó cerca y, entre una pared casual de sus adversarios, llegó el primer tanto del partido. Ante la desventaja, Boca atacaba por vía aérea tanto como terrestre, pero bajo los tres palos tuvo la firme respuesta de Luka Benyik.

En los últimos minutos de la primera etapa, ambos equipos se vieron condicionados: primero San Lorenzo por llegar a la quinta falta y luego Boca sufriría la expulsión de su guardameta (Mosenson usó la mano fuera del área evitando que el balón estallé en la red). Ante la inferioridad numérica, los de Garcias generaron un triángulo defensivo por los próximos dos minutos. Una vez que recuperó su quinto hombre, Boca se volcó al ataque y encontró la igualdad en los pies del «Fosa» Leguizamón, quien encontró el rebote del arquero tras el remate de Juan Pablo Cuello.

En los primeros minutos de la segunda etapa, los guardametas tuvieron intervenciones clarísimas de gol: primero fue el 12 de Boca que se quedó firme en la puerta del área donde esperó a su rival y rechazó el balón. Luego, su colega despejó con una mano el derechazo de Spellanzon.

A los 5 minutos, Sebastián Obando robó un balón en salida de su rival, se la cedió a su compañero y este tocó de primera para Echevarría, que no falló y puso en ventaja a CASLA. El «Xeneize» realizó la jugada de arquero jugador, su ataque se prolongó hasta que logró empatar el partido con el tanto de su número 10 -tocaron los cinco jugadores y, en el último toque, Rivera «guardó» la pelota en el primer palo-.

Los de Almagro no solo sufrieron el empate sino que a los segundos se quedaron con un hombre menos por la expulsión de Echevarría. Boca volvió a implementar la jugada de arquero jugador con Spellanzon, quien selló el 3-2 final y consagró el primer título para su equipo con un zurdazo fuera del área tras el rebote del guardameta que, segundos antes, había rechazado el remate de Vidal.

“La intensidad, nunca rendirse. Sabemos que teníamos nuestras armas, ellos jugaban muy bien, pero sabíamos que si nosotros hacíamos nuestro juego y estábamos mentalizados en lo que hacíamos sabíamos que lo íbamos a ganar”, enfatizó Leguizamón, uno de los nuevos refuerzos de Boca este año. Además, agregó que para él vale el doble por ser hincha de la institución.