Apertura del BAFICI

La apertura del 23° Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI) se llevó adelante el pasado 19 de abril en el Cine Multiplex Monumental Lavalle con la proyección de «Ahora ya sé donde encontrarte» de Diego Berakha y «Pequeña Flor» de Santiago Mitre.

El cortometraje de apertura está hecho a base de imágenes capturadas desde Google Maps, con el mérito de lograr un movimiento y un desplazamiento dentro del encuadre. Para esta imagen que descontextualizada se presenta plana y fría, el director trabaja la forma de presentar esos recursos para provocar un ritmo que se acerque a una idea cinematográfica de la cuestión.

El relato se centra en la infancia de Berakha en España hasta sus 12 años, cuando decide mudarse con su padre en Argentina. Recorre lo que dejó atrás a un continente de distancia y lo busca dentro del dispositivo mas extraño y, en teoría, más distante de la connotación sensible, pero lo encuentra.

Pequeña flor

«Petite fleur» se trata de una coproducción entre Francia, Argentina, España y Bélgica, dirigida por Santiago Mitre («El estudiante», «La patota» y «La cordillera»), que contó en el guion con la colaboración de Mariano Llinás («La flor», «Historias extraordinarias», «Balnearios»).

La película se presenta con la escena de un parto, el comienzo de una serie de sucesos extraños para José (Daniel Hendler), un rosarino que vive en Francia y que no aprende francés. Tiempo después del nacimiento de su hija lo despiden del trabajo y, mientras pasa el tiempo completo en casa, conoce a un vecino que transforma sus tardes en tragedias extremas que parecen resetearse cada semana.

El desarrollo busca la comedia, lo extraño y lo sangriento a cada rato, construye una encrucijada mediante elementos fantásticos que solo pueden resolverse en el plano de lo terrenal. La relación entre «la forma y el contenido» presenta un conflicto de dimensiones humanas teñida de un rojo sangre que genera la distracción perfecta. ¿Qué es lo que sucede mientras sucede la comedia negra? La crisis de una pareja, la intromisión en la mente de un hombre, la transformación de la sexualidad y, seguramente, más cuestiones. «Pequeña flor» es una película que decanta con el pasar de las horas.