De sueños y otros demonios

Dentro de la sección Óperas Primas, el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI) presenta «El sueño de la sultana», una película inspirada en el libro indio homónimo. En este relato animado, los sueños, las pesadillas y los temores se entrelazan de forma extraña y abrumadora.

Bajo la dirección de Isabel Herguera, este largometraje animado narra la historia de Inés, una mujer española que viaja a la India para resolver un problema personal. Allí, se encontrará de casualidad con el libro «El sueño de la sultana», un texto de la escritora bengalí Begum Rokeya y cuya premisa es parte de un país imaginario donde las mujeres son realmente poderosas, y los varones se quedan en sus casas. Una especie de matriarcado donde la ciencia, la política y el verdadero poder, está en manos de la mujer. Este libro se convierte en una obsesión para Inés y tanto la historia de esas mujeres como su autora, empezarán a influir y mimetizarse con su propia vida.

El tipo de animación es sumamente original, utilizando técnicas de acuarela combinadas con otras que remiten al arte indio. En este sentido, no pretende ser realista por lo que se toma ciertas licencias creativas y construye momentos eclécticos e inmersivos.

El cuento en el cual está inspirada fue escrito por Begum Rokeya, una activista y pensadora feminista de gran relevancia. Su obra plantea cambios de paradigma en cuanto al rol de la mujer y cómo esto afecta su desarrollo. De esta forma, la película no es para nada ajena a eso e introduce no solo su figura sino, también, temas relativos a la cuestión de género como los miedos que siente una mujer en distintas situaciones, la visión de mundo que esto conlleva y los procesos educativos, por solo nombrar algunos.

Uno de los puntos clave de «El sueño de la sultana» es la habilidad para plantear muchísimos interrogantes y adentrar a su espectador en una cultura que quizás le resulta ajena, pero a través de temas actuales y universales.

De esta manera, propone un viaje de autoconocimiento, revelaciones y empoderamiento. A partir de sueños y pesadillas, abrirá debates que parecían saldados, pero tal como sucede con más de una problemática, siguen más vigentes que nunca.

Deja una respuesta