El comercio de África

Luego del anuncio de la semana pasada de un paso clave en pos de un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea, la Unión Africana (UA) anunció este lunes que el Tratado de Libre Comercio Africano (AfCFTA) entra en su fase operativa tras la reunión de los Jefes de Estado de la UA.

De esta forma, el «continente negro» podría convertirse en el área de libre comercio más grande del planeta desde la formación de la Organización Mundial de Comercio (OMC). Desde marzo de 2018, 54 países africanos suscribieron el acuerdo aunque hasta el momento solo 27 lo ratificaron para poner en funcionamiento los instrumentos del AfCFTA. Los firmantes se comprometen a impulsar el libre comercio bajo las siguientes normas: Reglas de origen, Foro de negociación en línea, Seguimiento y eliminación de las barreras no arancelarias, Sistema de pagos digitales y Observatorio de comercio africano.

La secretaría del organismo estará ubicada en Ghana y tendrá la tarea de implementar el acuerdo luego de la firma en Kigali, capital de Ruanda. El 30 de mayo había entrado en vigor formalmente el tratado, luego de recibir el vigésimo segundo instrumento de ratificación, la cantidad mínima exigida por las disposiciones legales.

Cuando el tratado esté totalmente en vigencia, el 90% de las mercancías comercializadas en África no estarán sujetas a derechos de aduana. El bloque, integrado por 34 naciones, tiene una población de 1.300 millones de personas y un Producto Interior Bruto (PIB) combinado de 3,4 billones de dólares. Se espera que esta alianza comercial ayude a promover la industrialización africana, disminuir su dependencia de países de otros continentes o bloques económicos como China o la Unión Europea, y ser una primera etapa en camino a un mercado común del continente.

La UE es el mayor socio comercial de África, receptor del 36% del comercio de mercancías africanas y para 2017 representaba un monto por más de 243.000 millones de euros. Esto significa que el bloque europeo es el mercado más abierto a las exportaciones africanas en todo el planeta.

La eliminación de barreras arancelarias, a medida que las diferentes legislaciones nacionales se adapten al acuerdo, busca incrementar el comercio intra aficano y llevarlo del 18% actual a un 52%.

Al respecto, Carlos Lopes, el alto representante de la UA para las Negociaciones con Europa, señaló que este aumento traerá dos beneficios a los africanos: una menor dependencia del exterior y un fortalecimiento de la industria y el tejido productivo continental.

Por su parte, el economista senegalés Demba Moussa Dembelé sostuvo que «en un mundo cada vez más caótico, África tiene que unir fuerzas y tener una sola voz. Eso es el AfCFTA, que solo tendrá éxito si sienta las bases de la industrialización real del continente», y añadió que «con un enorme mercado interior, las industrias africanas podrán ser viables y este proceso debe liderarlo el sector privado. Tenemos las materias primas y empresas con capacidad. Ahora, además, contamos con el mercado. Sin embargo, hay que mantener una cierta protección del exterior. No puede ser que aprovechando las nuevas condiciones se produzca una invasión de productos chinos o europeos».

El presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, alertó que «tenemos que lograr las salvaguardas necesarias contra el contrabando y otros riesgos y amenazas». En ese sentido, el presidente del grupo empresarial de la alimentación BUA, el nigeriano Abdul Samal Rabiu, sostuvo que «tenemos que establecer un dispositivo para que los productos autorizados en el marco de este acuerdo sean 100% producidos en África y por africanos».