Ahora son tres
Luca Vildoza se convirtió esta semana en el tercer argentino en desembarcar, durante esta temporada, en la NBA. El jugador de Baskonia de España se incorporará a New York Knicks y su contrato será por cuatro temporadas aunque con una salvedad: estará bajo seguimiento durante el desarrollo de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y en la Summer League.
El base de 1,91 metros de altura y tan solo 25 años se encontraba en la mira de varias franquicias de la NBA, por tal motivo es que los Knicks se adelantaron al acordar su llegada. El coach Tom Thibodeau aclaró: “Lo veo más como un futuro que como una realidad para lo que resta de la temporada regular”, dijo sobre Vildoza. Es necesario señalar que Thibodeau tiene fama de jugar con un “equipo corto”, de pocos jugadores y, además, de respetar los lugares ganados. En el puesto de base, los Knicks no tienen a sus mejores exponentes no solo en el presente sino desde hace varias temporadas. Elfrid Payton es el titular pero es de los jugadores más resistidos. Como suplente está la otrora leyenda, el nombrado MVP más joven de la historia: Derrick Rose. Su brillo está casi apagado pero desde su regreso a New York encontró ese espíritu de sus primeros tiempos, incluso podría llegar a pelear el premio por “mejor sexto hombre del año”. Ambos bases terminan sus contratos al final de la temporada y, en el caso de Rose, se cree que es un hecho que renovará por un par de años más.
Clasificados y eliminados
A falta de cinco partidos promedio por equipo tenemos varios clasificados a los playoffs. Por el lado del Oeste: Utah Jazz, Phoenix Suns, Los Angeles Clippers y Denver Nuggets, mientras que en el Este son tres los que ya están en la postemporada: Philadelphia 76ers, Brooklyn Nets y Milwaukee Bucks. De este lado no hay sorpresas, pero sí lo son que Utah y Phoenix lideren la conferencia más competitiva.
En el caso de la franquicia de Arizona, es la primera clasificación a los playoffs en más de una década, incluso todavía pelea por ser el N°1 del Oeste. Los de Salt Lake City mantienen la regularidad de las últimas temporadas, de la mano de Donovan Mitchell y el francés Rudy Gobert, pero en el actual derrotero subió aún más su nivel de juego, incorporándose otros jugadores peligrosos para sus rivales como los casos del australiano Joe Ingles, el serbio Bojan Bogdanovic y el joven Jordan Clarkson, uno de los grandes candidatos a sexto hombre del año.
No todo es alegría y victorias, porque también hay eliminados tempraneros en la temporada. En el Este los que ya bajaron las persianas de las posibilidades, incluso para clasificar al play-in, son: Orlando Magic, Cleveland Cavaliers y Detroit Pistons. Tanto Orlando como Detroit enfrentaron un período de depuración: el equipo de Florida dejó ir a sus mejores exponentes, quienes se encontraban cansados de pelear en una franquicia sin ambiciones deportivas, mientras que los de Michigan nunca hallaron un norte para las incorporaciones de Blake Griffin y Derrick Rose, en lo que se pensó en un inicio como acoples para la figura de DeAndre Drummond, jugador que se fue a Los Angeles Lakers.
Si cruzamos hacia la otra costa, allí hay un patrón similar con algunos equipos eliminados y es el caso de Houston Rockets. La franquicia se desprendió de James Harden a mitad de temporada, luego de un último intento por rearmar el equipo con miras a los primeros planos de la postemporada. Las llegadas de John Wall (en un intercambio por Russell Westbrook con Washington Wizards), de DeMarcus Cousins y Viktor Oladipo hacían pensar que se renovaban las esperanzas para los Pistons. Los conflictos internos entre Cousins, Harden y Oladipo provocaron que los texanos optaran por un plan de transición al dejar ir a estos jugadores, y pensar en un futuro de reorganización, mientras el equipo se hundió en la tabla con el peor registro de la liga con tan solo 16 partidos ganados hasta el momento.
¿Qué es el mini torneo play-in?
La gran novedad de esta temporada es la incorporación de la modalidad play-in, un mini torneo para determinar qué equipos jugaran los playoffs. El play-in se experimentó en la “burbuja de Orlando” en lo que fue el regreso de la NBA para finalizar la temporada 2019-20, que había sido interrumpida por la pandemia de la COVID-19. No había forma de reprogramar todos los juegos restantes de esa temporada, por lo cual se jugaron menos partidos con menos equipos, por lo tanto este esquema podía llegar a beneficiar y perjudicar a muchos. El salvo conducto para no perjudicar a los que tenían una importante ventaja, y no beneficiar a los que estaban casi eliminados, fue crear un play-in: una serie de dos partidos que enfrenta al octavo y al noveno de la tabla. El octavo solo necesita ganar un juego para clasificar a los playoffs, mientras que el noveno está obligado a ganar ambos.
En la presente temporada, tal modalidad se presenta de forma expandida, el play-in lo jugarán los que queden entre el puesto 7 y 10 en ambas conferencias. El 7 irá contra el 10 y el 8 contra el 9, lo que se mantendrá será la forma: el 7 y el 8 con ganar un juego clasificarán, el 9 y 10 deberán salirse victoriosos en los dos partidos para llegar a la postemporada. Este mini torneo tiene voces encontradas: algunos creen que despierta mayor competitividad pero otros que premia a los mediocres con una oportunidad para llegar los playoffs. A falta de una semana para terminar la temporada regular, la lucha por los puestos que quedan está al rojo vivo.