Retorno al éter

Cae la noche invernal en el domingo porteño y el clima se presta para la distracción previa al lunes laboral. Seducidos por la cercanía del teatro, no dudamos en disfrutar de un espectáculo teatral que, especialmente aficionados a la filosofía, apreciarán.

Nos referimos a «Éter Retornable», obra interpretada por Camila Sebio y Pablo Rusconi, bajo la dirección de Laura Cecilia Álvarez y la creación de Angie Oña. Podemos observar que Elmer y Madelón, los personajes de la obra, se están separando pero nunca terminan de hacerlo. Desde el humor absurdo, la obra aborda temas como el conformismo (o el no hacerlo con nada), la forma de querer, el tiempo desperdiciado en pensar en un futuro que todavía no llegó, la vida y la muerte como una analogía sobre la felicidad y el concepto de eterno retorno de Friedrich Nietzche.

Al terminar la obra, Madelón deja su papel para volver a Camila Sebio, su más intrínseco ser, y se animó a indagar más en profundidad sobre la obra en la que actúa. Con su tono fresco, divertido pero contundente, respondió ante la confesión de la periodista que rezaba así: «Camila, me costó desprenderme de Romina, tu personaje anterior en ‘Eternos Transeúntes’, ¿me habré fanatizado con tu rol anterior?»

«Yo creo que los personajes son muy distintos, pero sí ambos son muy fuertes. Tienen una personalidad muy power. Madelón tiene una vuelta mas existencial, le cuesta accionar. Romina iba al frente», responde Camila.

¿Por qué crees una vez más que te toca «retornar al éter», después de la obra «Eternos Transeúntes»?

“Sí, hay algo en las dos historias que se encuentran en lo cíclico, en no poder salirse de los personajes, en no poder encontrarse con otros. También son personajes que me interesan. No lo había pensado, pero tiene que ver con lo que uno tiene ganas de contar como comunicadores. ¿Por qué me eligen siempre para estos personajes? Ni idea. ¿Qué tendré yo de todo esto?», completa entre risas.

¿Viste algún paralelismo entre lo retornable de la vida y de la pareja en la obra?

«A esta pareja le pasan cosas como a todos. Atraviesan problemas que resuelven y vuelven. Y al rato vuelven con algún conflicto. Porque están con problemas ellos. Ahí está el retorno: no pueden resolver lo propio y pretenden encontrar en el otro esa resolución que no encuentran. Y vuelven a caer en esa. Es cíclico.»

¿Qué tan retornable es la vida?

«Uf, ¡qué profunda! Creo que hay algo de lo cíclico en la vida. Me parece que la tarea es tratar de salirnos de esa rueda. Que no nos pase como a los personajes de quedarse o se conforman mucho o ponen la vara tan alta que nunca llegan. Me parece que la tarea consiste  en salir de ese eterno retorno. Pero hay algo que sí, nos pasa en los vínculos de encontrarte de nuevo con ese alguien que se parece al otro».

¿Cuándo podemos encontrar esta obra?

«Estamos los domingos 21.30 horas en el teatro Multiescena, en Avenida Corrientes 1764. Pueden adquirir sus entradas a través de plateanet.com y seguirnos en Instagram en @eter.retornable.»