Teatro simple y contundente
Parece que esperar la llamada de un gran amor del pasado o cambiar impulsivamente el rumbo de nuestra vida a causa de una promesa idílica son fantasías demodé. Pero las risas, suspiros, ruidos nerviosos, silencios elocuentes y aplausos del público que asiste al Teatro El Picadero los martes a las 20 horas a ver el…