Zverev terminó con la sequía

En la previa de Roland Garros, Alex Zverev derrotó 6-3, 3-6 y 7-6 (8) a Nicolás Jarry y terminó con seis meses de sequía y muchas dudas en su tenis. El alemán era el primer preclasificado del torneo del ATP 250 de Ginebra, donde consiguió su título número 11, el primero desde la consagración en el ATP Finals de Londres ante Novak Djokovic.

Por el lado del número 5 del ranking mundial, fue la primera conquista de la temporada en su segunda final: perdió ante Kyrgios en Acapulco. La final de este último torneo no fue nada fácil, ya que Jarry tuvo dos match points que no supo aprovechar. Con este resultado, el campeón sumó su quinto logro sobre polvo de ladrillo.

Por el lado del chileno, cayó en su segunda final del año. La anterior fue en Sao Paulo, sin embargo, ascendió 17 lugares y se ubica en el puesto 58 del ranking. Su compatriota Cristian Garín no pasó la segunda ronda al perder con Daniel Taro 6-2, 4-6 y 6-4.

Tres argentinos en Ginebra

Federico Delbonis fue quien tuvo la mejor semana: perdió en semifinales ante el campeón por un ajustado 7-5, 6-7 y 6-3. En rondas anteriores venció a jugadores destacados como Albert Ramos Vinolas y Grigor Dimitrov. El cordobés Juan Ignacio Londero superó la primera ronda al ganarle a Mischa Zverev por un doble 6-4, aunque no pudo con el quinto clasificado Radu Albot. El último argentino, Leonardo Mayer, no pudo pasar el encuentro inaugural al tropezar con Joao Sousa por 6-2, 6-7 y 6-4.

El otro torneo previo al segundo Grand Slam de la temporada fue el ATP 250 de Lyon, donde el local Benoit Paire se impuso a la joven promesa del tenis canadiense, Felix Auger-Aliassime, por 6-4 y 6-3 y así consiguió el segundo torneo del año y tercero de su carrera. Además, con este resultado llega al top 40.

El canadiense, de 18 años y actual 28 del mundo, cayó en su segunda final de la temporada (la anterior fue en Rio de Janeiro). Actualmente está en la segunda posición en la carrera a Milan, por detrás de Stefanos Tsitsipas. Por lo que viene mostrando, no falta mucho para que llegue su primera consagración.