A partir de este jueves 4 de abril y hasta el 10, inclusive, se va a llevar a cabo en el Complejo Cinépolis de Recoleta la 10° Semana de Cine Italiano, con propuestas interesantes y diversas, aportando una selección de 12 filmes dirigidos por algunos consagrados realizadores.
Esta muestra es organizada por Cinecittà con el apoyo de la Embajada de Italia, el Instituto Italiano de Cultura de Buenos Aires y la Agencia Italiana para el Comercio exterior (ICE).
Afortunadamente, dos de los cuatro filmes que comentaremos en esta nota tendrán estreno inminente en nuestro país.
«Lo Mejor está por Venir» (“Il Sol Dell´Avvenire”) de y con Nanni Moretti, que se había presentado en la Selección Oficial del Festival Internacional de Cine de Cannes del año pasado. Con esta propuesta, el director retoma la línea de comedia autorreferencial implementada en algunos de sus anteriores filmes, tales como «Caro Diario» o «Aprile».
Es una película dentro de otra y llena de homenajes y guiños al séptimo arte: Martin Scorsese, Demy, John Casavettes, Penn y Kieslowski, por citar tan solo algunos, desfilan a lo largo de su metraje, ya sea por referencias o a través de algunos de los fragmentos de sus realizaciones.
El director que da sustento a esta propuesta intenta filmar la invasión rusa a Hungría en 1956, y el efecto que tal decisión de gobierno genera en el Partido Comunista de Italia, obligándose el mismo a pronunciarse en contra de este atropello a un país vecino.
De esta manera, la película aúna la época actual en la que se está desarrollando el set de filmación, con la época pasada que se intenta retratar, y en este ir y venir de tiempos, se cuelan, como siempre, las agudas reflexiones de un Moretti que nunca decepciona.
Lo mejor y para disfrutar es la escena de un asesinato en rodaje, plasmada por un director cuyo film es producido por su esposa. «Lo Mejor…» es de inminente estreno en el país.
Otra película de época y que transcurre en Turín en 1938 es «El Lindo Verano» («La Bella Estate») de Laura Luchetti, parte de la competencia del Festival Internacional de Cine de Locarno 2023, que nos presenta a Ginia, aprendiz de modista, quien se redescubre a partir de la irresistible presencia de Amelia (personaje a cargo de Deva Cassel, hija de Mónica Bellucci y Vincent Cassel). Será esta quien introduzca a nuestra protagonista en un universo de bohemia, pintores, diversión y pulsiones amorosas.
Basada en la novela homónima de 1949 de Césare Pavese, este coming of age de preguerra se erige como una propuesta muy atractiva visualmente (para destacar la fotografía de Diego Romero Suárez Llanos y los decorados de Giancarlo Muselli) que, tal vez, remita a un modo de hacer cine más clásico y requiera de una mayor espesura dramática a la hora de pulsar las líneas narrativas de esta historia.
Afortunadamente, y luego de su paso por Cannes y también en Mar del Plata, esta joya de Alice Rohrwacher, «La Chimera», recrea el universo de los profanadores de tumbas en busca de tesoros etruscos para su posterior venta en el mercado negro, con una magia, una fuerza arrolladora de imágenes y una capacidad de seducir al espectador tan potente que, quizás, su mayor mérito resida en esa simpleza para relatar en espacios abiertos, contundentes, provocadores y mágicos.
Con toques absolutamente «fellinianos» y personajes que parecen escapados de algunas de las historias del recordado Federico Fellini, esta historia de amor fabulesca, mezcla de realidad y sueños proyectados, de amores perdidos y esperanzas pendientes, nos transporta de manera intensa al mundo del cine.
Rohrwacher es, actualmente, una de las directoras más interesantes de esta década. Corré a ver «La Chimera», que aún no tiene estreno asegurado.
Finalmente, designada para ser la película de apertura de esta semana, «Siempre Habrá un Mañana» («C´e Ancora Domani») es la ópera prima de Paola Cortellessi, que viene precedida de un sinnúmero de premios (mejor film internacional en el Festival de Goteborg y Premio del Público y del Jurado en la Fiesta del Cine de Roma, entre otros), describe, a modo de fresco neorrealista, el empoderamiento de la mujer en 1940.
Con impecables actuaciones de la propia directora -que se reserva el rol principal- y de Valerio Mastandrea, el film recorre las peripecias de un ama de casa frustrada, postergada y humillada, que proyecta en el casamiento de su hija un futuro y una vida que ella nunca tendrá.
El guion del film, de la propia realizadora en conjunto con Giulia Calenda y Furio Andreotti, nos revela una sorpresa sumamente emotiva e inesperada en el final, con el que todo lo relatado parece cobrar sentido. Vale mencionar que el film fue adquirido para su distribución comercial en nuestro país.
Artículo elaborado especialmente para puntocero por Luis Kramer.
