Afuera

Pablo Matera, Guido Petti Pegadizábal y Santiago Socino fueron separados del plantel de Los Pumas por decisión de la Unión Argentina de Rugby (UAR), producto de que se hayan publicado una serie de tweets de los tres jugadores con contenidos xenófobos y discriminatorios. Repudiables al 100%, sin importar cuándo hayan sido escrito los mismos.

La UAR emitió un comunicado de prensa en el que afirma que el órgano rector del rugby en nuestro país repudia los comentarios de los jugadores y remarca la condena a cualquier expresión de odio e inaceptable que quienes los expresen, representen a nuestro país.

Matera, que ya no es más capitán del seleccionado, pidió disculpas en sus redes sociales por lo escrito hace nueve años atrás. En su «descargo», manifestó su arrepentimiento y vergüenza. En la misma sintonía se expresaron Petti y Socino. Luego de que los jugadores muestren sus sentimientos sobre el caso, apareció el comunicado de la UAR.

Las sanciones sobre los jugadores tuvo efecto en compañeros de Matera y compañía. El primero en expresarse fue Matías Moroni, quien defendió al excapitán de Los Pumas, valoró el hecho de pedir perdón y «no esconderse atrás de algún escritorio». Además, remarcó su amistad con Matera.

Más filoso fue Tomás Lavanini, que directamente salió a cuestionar y criticar a la dirigencia de la UAR, «la gente que no da la cara, le suelta la mano al equipo como en otras veces».

El ex Puma, Juan Manuel Leguizamón, en tono más conciliador, llamó a «unir y no romper», aunque también repudió los dichos de sus excompañeros.

Serafín Dengra, histórico exjugador de Los Pumas durante la década del 8′, salió a criticar a los jugadores sin pelos en la lengua: «Es una locura que se mandaron hace 8 o 10 años. Eso no es el rugby, yo no soy eso, soy otro tipo de persona. Estoy totalmente en desacuerdo». En una entrevista que brindó en Radio La Red, también disparó con munición gruesa por el homenaje a Maradona: «Se les escapó la tortuga. Y es difícil que se te escape la tortuga porque es lo máximo, el Diego es Dios, es inexplicable. No puedo creerlo. Estoy indignado. Es triste».

Por su parte Matias Lammens, ministro de Deportes y Turismo, se refirió a este tema: «La decisión es ejemplar, pero el problema es mucho más profundo. La solución no va a estar en el castigo y hay que trabajar mucho en cuanto al rugby. Preocupa y mucho porque no es algo nuevo».

Los tweets se dieron a conocer una vez que la UAR emitió un vídeo en el que el plantel de Los Pumas, con Matera como orador, se disculpó del pobre homenaje rendido a Diego Armando Maradona previo al partido frente a All Blacks.

Es cierto que los dichos repudiables de los tres jugadores fueron escritos hace nueve años. También, puede ser, que los mismos hayan cambiado su parecer en el transcurso de este tiempo. Pero la discriminación y la estigmatización de una clase social sobre otra es inadmisible.

Otra vez, el eje de discusión se da sobre los supuestos valores del rugby. No está de más recordar la manera en que comenzó este año con el asesinato de Fernando Báez Sosa, a manos de 10 asesinos que practicaban este deporte.